El amor propio se puede aprender y es necesario hacerlo

El amor propio, concuerdan los psicólogos, es un requisito previo para una asociación feliz. El psicoanalista Erich Fromm incluso vio el amor propio como la base para amar a otras personas. Pero, ¿cómo se puede aprender el amor propio?

Cuando reconoces plenamente todo lo que te hace ser tu mismo, lo que te gusta de ti mismo y lo que no te gusta de ti mismo, estás de acuerdo con ese ser y te amas totalmente, entonces ese es el amor que tienes para ti mismo.

¿Qué es exactamente el amor propio?

El amor propio significa mucho más que el amor de la propia apariencia. Implica el amor al propio ser, la propia personalidad. ¿Conoces la sensación cuando alguien descansa en uno mismo, irradia serenidad, es despreocupado y, por lo tanto, totalmente atractivo? Las personas que se valoran y se respetan a sí mismas, más fácil pueden relacionarse con los demás. Si aprendes a amarte a ti mismo, también puedes permitirte amar a otros y permitir que te amen.

Quien se ama, aprende a tener más posibilidades de encontrar pareja

Cualquier persona incapaz de desarrollar el amor propio se enfrenta a grandes desafíos, no solo cuando busca una pareja, sino también a menudo dentro de una sociedad. Aquellos que son impuros consigo mismos a menudo tratan de equilibrar esto con una relación de amor. Que esto no pueda tener éxito es obvio. Si no nos amamos y reconocemos, ¿cómo se supone que nuestra pareja deba hacer eso?

Con este conocimiento, sin embargo, nada se gana. Veamos primero cómo se desarrolla nuestra personalidad antes de que se pueda aprender el amor propio. Desde la infancia recopilamos experiencias, impresiones y percepciones, también acerca de nosotros mismos, a partir de esto desarrollamos creencias internas que, como tales, rara vez reconocemos o cuestionamos.

Las creencias internas surgen en la infancia y la juventud y a menudo son moldeadas por la familia. Se manifiestan en el curso del desarrollo de la personalidad hacia las creencias propias, proceso que determina el surgimiento de una autoestima saludable.

La forma en que uno piensa y habla sobre uno mismo puede ser reconocida por los monólogos internos. Estos pensamientos y autoevaluaciones que ocurren automáticamente pueden ser observados y analizados.

Entonces, uno puede aprender el amor propio sobrescribiéndolo conscientemente con oraciones más positivas. Se necesita práctica y resistencia, pero funciona. Con el tiempo, pueden surgir nuevas y positivas creencias sobre uno mismo. Un método que es común en la terapia cognitivo conductual.

Consejos para aprender el amor propio

Las buenas noticias de antemano: puedes cambiar tus creencias, tus creencias personales mediante ejercicios específicos. El amor propio puede por lo tanto ser desarrollado. Una clave para esto son los monólogos internos, la «voz interior«. Préstale atención: tu comentarista personal está constantemente en acción y juzga todo. Con suficiente frecuencia, refleja creencias negativas sobre ti mismo.

Si piensas antes de una presentación en la oficina, «Me avergonzaré de nuevo: ¿qué piensan de mí si vuelvo a cometer un error?«, Entonces este temor probablemente se volverá realidad. Aprende el amor propio al no pensar en nada más. «Si sigo diciéndome a mí mismo que no soy lo suficientemente bueno, que soy malo o algo similar, entonces lo manifesto en mi vida«.

Aprendiendo el amor propio fortaleciendo el «yo»

«Un método muy poderoso comienza con las dos palabras «Yo soy …«; crea una visión suprema de ti mismo y elige un nuevo «Yo soy …» que te integrará en la vida cotidiana. «Soy un creador poderoso», por ejemplo, aporta resultados completamente nuevos». Esto pone tus puntos fuertes en primer plano y ya no tus puntos débiles.

Estar agradecido

Otro consejo para aprender sobre el amor propio es el ejercicio de gratitud de la mañana.

«Esté agradecido por lo que ya ha logrado y por lo que desea, como si ya lo hubiera logrado».

Imagina cómo pasa el día. Trata de estar agradecido por tu despertar en la mañana, por el nuevo día que te permitirá obtener nuevas experiencias. Así es como aprendes el amor propio. Agradece a la gente que conoces. Enfoca tu atención en las cosas hermosas.

Cuidarse

Si te tomas el tiempo para ti mismo, aprendes a amarte a ti mismo. ¡Cuídate! Medita a diario, simplemente comienza, incluso si solo son tres minutos. Así es como te enfocas en ti mismo.

Expresar amor por ti mismo y por los demás

Importante para aprender a amarse a uno mismo también son las palabras «Me amo a mí mismo«. Trae amor a tu vida diciéndolo: ¡Me amo a mí mismo! Y dile a los demás que los amas. Porque todo lo que quieras del otro, puedes empezar por dártelo tu mismo. Debes empezar por darte para luego poder recibir y querer más.