Hans Asperger – Relación con el espectro autista

Hans Asperger biografía y trabajos relacionados a la psicología

Hans Asperger fue un psiquiatra vienés cuyo nombre ha sido asignado a una manifestación del autismo. Su biografía resulta ser una lectura bien peculiar.

Hans Asperger, nacido y fallecido en Viena (febrero de 1906 – octubre de 1980), fue un investigador formal, pediatra, profesor de medicina y reconocido psiquiatra austríaco. Se dio a conocer por sus exploraciones en el área de los desórdenes mentales infantiles. Durante su existencia casi no se popularizó su labor, con la excepción de haber recibido unos pocos premios locales. Sin embargo, sus estudios sobre las perturbaciones psicológicas alcanzaron fama mundial a principios de los 80 con los nuevos descubrimientos sobre los trastornos del espectro autista (TEA).

La definición de TEA es amplia; su manifestación incluye limitaciones comunicacionales y en las relaciones interpersonales, ligadas a patrones repetitivos e incontrolables de conducta. Por años se creyó que esta condición solo afectaba a la población infantil. No obstante, en la actualidad se sabe que se trata de un problema permanente que continua con el individuo durante toda su existencia. Algunos aspectos del autismo que requieren profundizar la investigación son sus manifestaciones en los adultos y en el sexo femenino.

Una de las expresiones del trastorno del espectro autista es el Síndrome de Asperger, nombre asignado en honor del eminente psiquiatra. Esta es una alteración o perturbación neurobiológica con impacto mental y conductual. Aunque se relaciona con el autismo, se le cataloga como de funcionamiento superior y se asocia a individuos con un coeficiente de inteligencia por encima del promedio. Estas personas tienen relaciones interpersonales limitadas, no entienden el lenguaje figurado (por ejemplo, el sarcasmo), son egocéntricos, entre otras características. 

Breve biografía de Hans Asperger

A Asperger, de niño, le resultó difícil desarrollar amistades y por tanto creció siendo un solitario aun cuando tenía un hermano mayor. Además, presentó algunos de los síntomas asociados con el síndrome descrito. Por ejemplo, tenía una elevada dotación para el lenguaje, le divertía citar sus propias frases y con frecuencia se refería a sí mismo en tercera persona. Egresó de la Universidad de Viena con el título de doctor en medicina en 1931. Y al año siguiente fue nombrado director de la sección de educación especial en la clínica universitaria para niños de la misma ciudad.

Su meta era especializarse en el área de pediatría y particularmente, en técnicas pedagógicas para tratar a infantes y adolescentes con requerimientos especiales. Su tesis doctoral fue sobre cuatro niños que mostraban falta de empatía, escasa habilidad para hacer amigos, charlas unidireccionales, intensa concentración por temas particulares y torpeza física. Él los llamaba “pequeños profesores” por su gran talento y dominio sobre cuestiones concretas que les interesaban en lo personal.

Sus teorías refutaban parcialmente a las de Leo Kanner, padre del TEA; así, Asperger encontró que estos niños presentaban una variación que denominó psicopatía autista. Su tesis se publicó en el año 1944, pero no sería sino hasta casi 40 años después que Lorna Wing reabriría los descubrimientos del fallecido médico. Esta psiquiatra británica, madre de una niña autista, usó por primera vez la expresión “síndrome de Asperger” para identificar dicha variación del trastorno en 1981.

Aportes al campo de la psiquiatría y el autismo

El término tuvo amplia acogida y a un siglo de su nacimiento, al 2006 se le declaró Año Internacional del Síndrome de Asperger. Aunque no existen abundantes documentos que lo prueben, la imagen que trasciende de este psiquiatra es positiva. Fue una persona comprometida con la investigación científica y con el cuidado de los niños. Se le toma como un abierto opositor del régimen nazi; no obstante, investigaciones publicadas recientemente proporcionan una versión contradictoria.

Edith Scheffer, una experta en historia moderna, afirmó en 2018 que el psiquiatra austriaco se había identificado con la ideología nazi. Asimismo, le acusó de participar en la eutanasia de una gran cantidad de niños con problemas mentales durante el período de la Austria ocupada. Asperger nunca se hizo miembro del partido de la esvástica, ¿es esto una prueba de su inocencia o fue una máscara para que sus crímenes quedaran impunes? Quizás algún día podamos conocer toda la verdad del caso.   

Dejando de lado esta oscura duda sobre Hans Asperger, desde el año 2007, cada 18 de febrero, aniversario de su nacimiento se celebra el Día Internacional del Síndrome de Asperger. Este hombre escribió en 1944: los autistas tienen un lugar dentro de la sociedad. Cumplen mejor que muchos con su rol a pesar de las dificultades sufridas durante la niñez y las preocupaciones causadas a sus padres.