Yang Yongxin | Terapia electroconvulsiva para la adicción a Internet

Biografía del psiquiatra Yang Yongxin

Yang Yongxin es un psiquiatra chino fuertemente cuestionado por la violación de los derechos de sus pacientes (menores de edad), debido a sus prácticas clínicas

Yang Yongxin (fecha de nacimiento: junio de 1962) es un psiquiatra clínico de origen chino. En la actualidad es una de las autoridades del Hospital psiquiátrico de Linyi. Asimismo, funge como el director del centro de tratamiento de la adicción a internet, dentro de la misma institución. Este es un organismo dedicado a la búsqueda de una solución satisfactoria al problema de la ciberadicción en muchachos jóvenes. El procedimiento de Yang, llamado estimulación, combina terapia electroconvulsiva con medicamentos, lo que resultó ser sumamente controvertido. 

La terapia de electrochoque (TEC) es un procedimiento psiquiátrico que se utiliza para provocar convulsiones en el paciente, por medio del uso de la electricidad. Se emplea en el caso de depresiones profundas que no ceden con otras técnicas. Asimismo, es aplicada para tratar catatonias, esquizofrenias y manías caracterizadas por euforias o irritaciones, manifestadas junto con síntomas psicóticos. La TEC, que requiere de anestesia, se conoce desde los años treinta; sin embargo, en la mayoría de los casos los resultados logrados son temporales.     

Yang trató con electroconvulsoterapia, alrededor de tres mil personas antes de que el Ministerio de Salud la prohibiera. Según sus afirmaciones, alrededor de un 95% de los casos habían mostrado una mejoría palpable con el uso de dicho método. Posteriormente, desarrolló un nuevo procedimiento, al que llamó terapia de pulso de baja frecuencia. No obstante, la gente se ha quejado de que el mismo resulta incluso más doloroso y molesto que la TEC original. Los medios de comunicación han cuestionado con frecuencia al médico. 

Biografía de Yang Yongxin

El nombre del psiquiatra sigue la metodología onomástica china, por lo cual, el apellido (Yang) se escribe primero. Este hombre recibió su título de médico clínico en 1982, con tan solo 20 años de edad. El mismo le fue otorgado por una institución vocacional de Yishui, ciudad cercana a Shanghái, en su provincia natal de Shandong. Estas escuelas se diseñan para impartir educación vocacional; es decir, suministran a sus alumnos las habilidades y herramientas técnicas requeridas para ejecutar tareas específicas.

A partir del momento de su graduación, Yang comenzó a trabajar en el Hospital psiquiátrico de Linyi, especializándose en técnicas dedicadas a pacientes esquizofrénicos y depresivos. Además, obtuvo una amplia experiencia en el tratamiento de los trastornos obsesivo-compulsivo y de ansiedad. Yang es un miembro activo del Partido Comunista de China, una de las organizaciones políticas más grandes del mundo hoy en día. También se le conoce por ser el escritor de diversas columnas, para una publicación local, que versan sobre temas psicológicos.   

El interés de Yang por la adicción a Internet comenzó a finales del siglo pasado, cuando detectó que su hijo se comportaba como un adicto frente a la súper red. A principios del año 2006 comenzó a aplicar la electroconvulsoterapia en pacientes. Propuesta que fue muy bien acogida, en sus inicios, por los medios de comunicación nacionales. Esto le llevó a recibir un reconocimiento, por parte del gobierno de Shandong, como uno de los más notables ciudadanos dedicados a proteger las mentes de los menores de edad.     

Controversias generadas por el trabajo de Yang

La controversia sobre Yang Yongxin se generó cuando el canal de televisión más visto del país, emitió un reportaje especial sobre su labor. “Lucha contra el demonio de Internet: ¿Quién convirtió a nuestros genios en bestias?” fue el nombre del programa. Este ensalzó la terapia de electrochoque y criticó con dureza un videojuego de gran popularidad en el país, World of Warcraft. La emisión levantó una ola de escándalo entre los usuarios del juego, que se propagó al resto de los chinos interesados en el ciberespacio.

Los que se oponían a Yang hicieran públicas entonces las controversias más llamativas que existían sobre la práctica de la TEC. Esto ocasionó que una gran parte de los medios de comunicación retiraran el apoyo inicial a su centro de tratamiento. Sin embargo, el Consejo del Estado, en 2009, le entregó una beca a la excelencia en la medicina. En ese mismo año, se publicó en prensa un informe muy negativo sobre las actividades del psiquiatra. La televisión se involucró, mostrando un segmento de un adolescente drogado por sus padres, al cual se le aplicó una hora de electrocución.     

La fuerte reacción del público, finalmente, obligó al Ministerio de Salud a intervenir. Fue así, como prohibieron a Yang la aplicación de la electroconvulsoterapia. La polémica mostraba que los jóvenes, entre 12 y 30 años de edad, presuntamente adictos a Internet eran tratados por trastornos de la personalidad. Pero, además salió a la luz que, con autorización de sus padres, estos habían sido secuestrados y obligados a revelar las contraseñas de todas sus cuentas online. También se mencionó que los pacientes eran amenazados y torturados bajo un régimen militar.   

Por último, Yang Yongxin usaba, aparte de la terapia electroconvulsiva, drogas psicotrópicas sin el expreso consentimiento de los adolescentes o de sus padres. El alegato era que el diazepam, paroxetina y otros, actuaban como suplementos vitamínicos. Los pacientes eran adiestrados para una obediencia absoluta al psiquiatra, al que tenían que llamar tío Yang. Y se les advertía que serían castigados si pedían a sus representantes que los sacaran de la institución. Actualmente, la legislación china asume que los derechos de los menores fueron violentados.