Síndrome de la mujer maltratada: síntomas, etapas y tratamiento

El síndrome de la mujer maltratada

Existen características diversas en una mujer maltratada y te sorprendería saber que la mayoría de las veces no son tan evidentes.

El síndrome de la mujer maltratada está referido a un serio trastorno de carácter patológico de sumisión, que presentan algunas mujeres que son o han sido víctimas de algún tipo violencia de género continuado.

En este tipo de patología, la víctima llega a acostumbrarse a la relación abusiva e intenta  ocultarlo; muchas veces debido al terror que ha creado en ella el maltratador.

La sintomatología que presenta una mujer con el Síndrome de la mujer maltratada, tiende mucho a asociarse con la que presenta una persona con trastorno de estrés postraumático; pero en el fondo hay marcadas diferencias que deben conocerse a cabalidad para no caer en errores de interpretación.

En este tipo de situación, la victima de maltrato atraviesa por un largo proceso de agresiones de distintos tipos; que lamentablemente, de no tomarse las medidas inmediatas necesarias, puede concluir con el deceso de la persona a manos de su maltratador.

Síntomas que presenta la víctima de maltrato

Las mujeres que son víctimas de maltrato suelen presentar las siguientes características:

Tienen muy baja autoestima

 El maltratador denigra tanto de la víctima, que le llega a convencer de que su valor como persona es nulo y por eso, estas víctimas llegan a considerarse fracasadas, predominando en ellas la baja autoestima y la creencias de no merecer más que lo que recibe.

Padecen de tristeza crónica

Su semblante refleja un hondo abatimiento, producto de soportar horas de angustia y depresión; acompañados de una sensación de impotencia e insomnio.

Por esta razón, su equilibrio emocional se ve extremadamente resentido por lo que puede llegar a presentar cuadros de depresión y ansiedad.

Etapas que se experimentan en el  síndrome de mujer maltratada

Son un total de cuatro (4) las etapas por la que atraviesa una mujer que ha sido víctima de maltrato continuado, a las cuales se refiere a continuación:

1. Etapa de negación

La víctima se niega a aceptar, e incluso en ocasiones ella misma se lo cree, asegurando que no ha sido víctima  de maltrato; recurriendo siempre a la negación de que algo anda mal en su relación de pareja.

2. Etapa de culpabilidad

En esta etapa, a pesar de que reconoce la existencia de un problema, se considera responsable de la situación y siente que “merece” ser castigada por sus defectos; por no estar a la altura de lo que el maltratador espera de ella.

3. Etapa de Iluminación

Comienza a entender que nada de lo que está sucediendo es su responsabilidad y que realmente no merece el maltrato que ha recibido hasta ahora; aunque en el fondo alienta el deseo y la esperanza de que los problemas se solucionen.

4. Etapa de aceptación

Finalmente entiende que no hay manera de que el maltratador enmiende su conducta y que no queda otra solución que tomar caminos separados.

Tratamiento que debe seguir la víctima de maltrato

Por lo general, se hace necesario que la mujer pase por un período de concientización y que tome la decisión de terminar de salir de una buena vez de la relación violenta:

1. Pedir ayuda psicológica

Si se presenta algún tipo de dificultad para dar este gran paso, debe considerar solicitar apoyo  terapéutico hasta que se sienta en condiciones de tomar una decisión definitiva por su propia cuenta.

Una vez tomada la decisión, el apoyo terapéutico debe centrarse en la evaluación de las secuelas emocionales concretas que ha dejado la situación de maltrato vivida por la víctima; para establecer el tratamiento más acorde.

2. Asistencia informativa

La víctima debe recabar toda la información que pueda obtener referida a la violencia de género, cuáles son sus causas, como se origina, cuales son los mitos que la rodea, etc.

 Estar informada le permitirá conocer su condición y entender el por qué actúa como lo hace y tolera el maltrato.

3. Tratamiento médico / farmacológico

Debe tener como finalidad controlar los estados de ansiedad, en las diferentes formas en que esta se manifieste, ya sea a manera de insomnio, de agorafobia, de eventuales crisis de pánico, etc. Este tipo de tratamiento debe estar bajo cuidado médico y previsto por el especialista.

4. Redescubrirse

Debe fomentarse la autonomía, a través de un cambio radical de la opinión que tienen sobre sí mismas y una reinserción a nivel social, económico, familiar y laboral. Es necesario abrir su mente y espacio físico para generar el cambio necesario en sus pensamientos.