Resistencia mental en el deporte y cómo mejorar el autocontrol

La resistencia mental en el deporte y el control

La fortaleza mental consiste en: compromiso, control, confianza y desafío. El control en el deporte te permite determinar qué puedes y qué no puedes cambiar. ¿Qué significa el sentido de control? ¿Cuáles son las características de las personas con un alto y bajo sentido de control? ¿Cómo afecta la sensación de control a un jugador?

¿Qué es el control en el deporte?

El control es un sentido de influencia en la propia vida. En otras palabras, es si crees que puedes controlar lo que te está sucediendo o si tu vida está siendo afectada por otra cosa. ¿Tienes total influencia en los eventos de tu vida, o sientes que el mundo se mueve como le plazca y no puedes hacer nada al respecto, pase lo que pase?

Sentido de control fuerte

Las personas con un sentido de control fuerte creen que su éxito depende totalmente de ellos. Sienten que tienen un impacto real en el logro de sus objetivos. Para ellos no es necesario reforzar esta creencia. Esta certeza interna de que tienen control sobre la situación es constante, independiente de las opiniones de los demás.

Probablemente, nadie se sorprenderá de que las personas con un fuerte sentido de control puedan administrar mejor su tiempo, establecer y alcanzar objetivos de manera más efectiva.

Ellos ven más soluciones que problemas y voluntariamente emprenden actividades adicionales porque creen que pueden hacerlas. Además, sienten que lo que están haciendo realmente importa, y esto los motiva a actuar y asumir nuevos desafíos.

Manejo de emociones

Un sentido de control es también la capacidad de manejar las emociones. El manejo de las emociones determina en qué medida una persona controla sus emociones y en qué medida las revela a los demás. Es importante destacar que esto se trata de manejar las emociones y no de no mostrarlas.

Las personas con un fuerte sentido de control deciden cuánta información sobre su estado emocional transmitirán a los demás. Esta es una habilidad importante para los atletas. Tan solo recuerda la importancia del lenguaje corporal. Incluso si estás nervioso por competir, probablemente preferirías que tus oponentes no lo supieran.

El lado opuesto, es decir, el sentido de control débil

Por otro lado, las personas con un bajo sentido de control están convencidas de que no pueden controlar sus vidas. Lo que les sucede está más allá de su control personal y no pueden influenciarse a sí mismos ni a los demás de ninguna manera. También creen que su contribución al desempeño de cualquier actividad no es importante, por lo que no vale la pena emprenderla.

En la vida de las personas con bajo control, puede aparecer mucha desorganización e incluso caos. Son reacios a emprender nuevas tareas porque tienen miedo al fracaso. También son menos positivos y verán el problema antes que la solución. Una voz interior les dice: «No estoy seguro si podré manejarlo«.

Un control más débil también significa tener una menor capacidad para manejar las emociones. Estos jugadores pueden ser fácilmente provocados, y se muestran temerosos ante un oponente seguro de sí mismo. También mostrarán con mayor frecuencia que se sienten frustrados, lo que en muchos casos también impulsa a los rivales.

El sentido de control en el deporte

Tener un conocimiento real sobre lo que está bajo nuestro control y lo que no es invaluable para los atletas. En todos los deportes hay factores sobre los cuales los jugadores no tienen control, por ejemplo, el estado de la cancha, los resultados de los partidos anteriores de los rivales o el clima. Muchos atletas les prestan demasiada atención, y analizan cosas que no pueden cambiar.

Centrarse solamente en estos aspectos no aporta nada bueno y generalmente conduce a una actitud negativa, preocupación y una disminución de la confianza. Se debe prestar la mayor atención a aquellos factores que tienen un impacto real, por ejemplo, preparación para la competencia, entrenamiento y actitud.