Lev (leo) Lopatin nació el 13 de junio de 1855 en Moscú. En 1875 ingresó en la Facultad de Historia y Filología de la Universidad de Moscú. Después de graduarse, se quedó en el Departamento de Filosofía para prepararse para una cátedra.
Desde 1885 fue privatdozent y desde 1892 extraordinario profesor universitario. En 1886 defendió su maestría y en 1891 su tesis doctoral.
Creaciones Literarias de Leo Mikhailovich Lopatin
Desde 1894, coeditor de la revista «Cuestiones de filosofía y psicología». Desde 1899 – Presidente de la Sociedad Psicológica de Moscú. La principal obra filosófica de Lopatin es «Problemas positivos de la filosofía», que incluyó sus disertaciones de maestría y doctorado.
Entre las obras más serias de Lopatin se encuentran “La cuestión del libre albedrío”, “Crítica a los principios empíricos de la moral”, “Perspectiva científica y filosofía”, “El presente y futuro de la filosofía”, “El espiritismo como sistema monista de filosofía”.
Lopatín y su método de metafísica personalista
Lopatin definió su propio sistema como espiritualismo concreto o metafísica personalista. Compartió la conclusión de su amigo V.S. Solovyov sobre el estado de crisis de la filosofía europea en la segunda mitad del siglo XIX.
Lopatin vio la razón en el rechazo de la filosofía moderna del ontologismo y en su transformación en un «servidor» ya no de la teología, sino de la ciencia. La experiencia de negar la tradición metafísica resultó estar plagada de la pérdida del conocimiento filosófico, de la verdadera independencia e incluso de la identidad.
Lopatin esencialmente planteó y resolvió el problema del «renacimiento» de la metafísica. El conocimiento metafísico en su interpretación existe en dos versiones: centrado en la justificación racional de verdades inexpertas o basado en la fe en algunos principios lógicamente no probados.
Consideró los sistemas racionalistas de Spinoza y Hegel como tipos clásicos de ontología de la mente. La espiritualidad universal del ser, según Lopatin, permite reconocer la realidad de la libertad humana, y con ella la posibilidad de acciones verdaderamente morales y verdaderamente creativas.
Lev Mikhailovich Lopatin murió el 21 de marzo de 1920 en Moscú.
