La Activación Conductual, la que continuaremos nombrado abreviada (AC), es un tipo de terapia que asume el tratamiento de la depresión; desde un punto de vista funcional y del contexto de la persona.
Es una terapia bastante reciente, ya que no cuenta con más de 30 años desde que se inició.
Lo que debemos decir sobre las personas que han creado este tipo de atención; la AC se basa en la persona y su contexto para poder explicar sus síntomas.
De esta manera, la terapia afirma que trabajar con base a la persona en sí misma, brinda mejores resultados que hacerlo desde el enfoque de los síntomas o de algunos factores internos, como alteraciones del tipo neurobiológicas o de la sintomatología psicológica que esté presente.
Adicionalmente, la Activación conductual o AC aduce que el comportamiento de las personas que presentan cuadros depresivos, va mas allá que unos meros síntomas dentro de un cuadro clínico, y que este tiene un significado muy importante dentro de la afección.
¿Cuál es el origen de esta terapia?
La AC tuvo su base en las diferentes técnicas conductuales, que se realizan en medio de la Terapia Cognitiva de Aaron Beck. Inicialmente, se pretendía hacer una comparación que involucrara a todos los tratamientos que se utilizaban para el mismo tratamiento de la depresión.
Tras una serie de análisis comparativo entre las distintas maneras de enfocar el tratamiento, se llegó a la conclusión de que solamente bastaba hacer una modificación conductual en los pacientes, en lugar de aplicarles toda la terapia completa.
Los mismos resultados indicaron que las técnicas utilizadas en la intervención cognitiva, no eran tan fundamentales en el tratamiento de la depresión; convirtiéndose más en un lastre que una solución.
De esa manera, nació la proposición de considerar la intervención esencialmente conductual a manera de terapia; sin relacionarla con la terapia cognitiva tradicional, llegando así a transformarse en lo que hoy llamamos Activación Conductual.
Es prudente aclarar que aunque la AC no se enfoque en la cognición de la persona, bajo ninguna circunstancia esta es ignorada.
Por el contrario, hay la intención de que esta se modifique como resultado de los cambios en la conducta.
¿Cuáles son los principios que atañen en una terapia de AC?
Hay dos condiciones que deben ser evaluadas antes de iniciar una terapia a través de la AC:
- El proceso que conllevó a la conducta.
- Lo que produce esta conducta en la persona.
Es así, entonces, la forma en como la AC actúa: Primeramente hace un estudio de los acaecimientos de importancia que ocurren en la vida de la persona y en segundo lugar, evalúa el comportamiento que se da como respuesta a estas situaciones.
¿Cómo se realiza este tipo de intervención psicológica?
Exista una tendencia en las personas con cuadros depresivos, a evitar diversas situaciones mediante el cese de sus tareas habituales.
Por esa razón, la terapia de AC busca activar nuevamente las dinámicas de comportamiento que tenía la persona antes de caer en la depresión.
Para ello, es fundamental primeramente activar a la persona aunque esta se encuentre deprimida.
De esa manera la AC busca incrementar paulatinamente las conductas positivas en la persona, para que encuentre los reforzadores necesarios que motiven un cambio conductual en ella.
Ventajas que presenta la terapia de de Activación Conductual
La Activación Conductual ofrece algunas ventajas comparativas, en relación a las terapias tradicionales que se aplican en los casos de aparición de cuadros depresivos:
1. No necesita de la aplicación de medicamentos:
La AC tiene una ventaja de no ameritar medicación, lo que significa para el paciente que no tendrá gastos farmacológicos ni tendrá que sufrir por los efectos secundarios que estos provocan.
2. Es la mejor alternativa a la terapia cognitiva:
Sus resultados son mucho más eficaces y rápidos que la terapia cognitivo-conductual, motivado a que los cambios en las creencias y en el modo de pensar de la persona que implica esta última, conllevan un tiempo considerable para dar resultados.
3. Resultados en corto tiempo
La dinámica de la terapia de AC se ajusta a las necesidades primarias del paciente y hacia allí van dirigidos todos los esfuerzos.
Bajo esa metodología, el tiempo que se requiere para lograr cambios significativos es relativamente corto; promediándose unas 15 sesiones para tal fin.
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