Karl Jaspers – Filosofía existencialista moderna y psiquiatría

Biografía de Karl Jaspers

Karl Jaspers fue un psiquiatra y filósofo destacado del siglo XX. Su influencia sobre la teología, las prácticas de la psiquiatría y la filosofía moderna llega hasta nuestros días

Karl Jaspers (febrero de 1883 – febrero de 1969) fue un eminente psiquiatra y, además, notable filósofo alemán de noble cuna. Su trabajo causó un fuerte impacto en otra área, además de las dos ya mencionadas, la teología. Por otro lado, fue un consejero y soporte importante para su país, durante los tiempos de la reconstrucción, posteriores a la Segunda Guerra Mundial. Y su crítica a los conceptos de enfermedad mental que se enseñaban para la época, significó un gran avance en dicho campo.

La filosofía existencialista es una corriente de pensamiento que se dirige hacia el estudio y análisis reflexivo de la condición del ser humano. También se centra en la libertad del individuo y en sus distintas responsabilidades como un ente pensante que pertenece a una sociedad. Por último, toma en cuenta la presencia de las emociones y el sentido más profundo de la existencia. Jaspers fue uno de sus grandes defensores e impulsores y quizás uno de los filósofos más ilustres de ese modelo ideológico.   

Jaspers aplicó sus más profundas y reveladoras reflexiones al drama de la humanidad y a sus trastornos más impactantes. Estos problemas son las comunicaciones interpersonales, el sufrimiento físico y mental, la carga asociada a la culpa y el temor a la muerte. En lo que respecta a la psicología, compartía criterios y puntos de vista con Wilhelm Dilthey (1833-1911), destacado filósofo germano. También estimuló el uso de la fenomenología en el área psiquiátrica, con miras a hallar una causa más subjetiva de los eventos psicológicos.

Biografía de Karl Jaspers

Siendo estudiante de leyes, en un giro de 180 grados, decidió cambiarse a la facultad de medicina. Asimismo, era un lector incansable, y durante su período escolar había estudiado a Baruch de Spinoza, filoso judío neerlandés alejado de la fe ortodoxa. De él entendió la importancia de la prudencia y el discernimiento intelectual. De Edmund Husserl, filósofo, físico, matemático y astrónomo alemán, tomó la fenomenología como herramienta para describir las experiencias psicopáticas. 

Jaspers admiraba profundamente el método husserliano, su seriedad y rigor; así como, el hecho de haber superado el psicologismo. Llamaba de este modo a la corriente de pensamiento que apunta a que todos los problemas se pueden resolver gracias a un determinismo psíquico. Desde sus inicios en la facultad de medicina, fue dirigido por Franz Nissl, reconocido psiquiatra y anatomista cerebral. Así, mostró un gran interés por los trastornos mentales, publicando Psicopatología general en 1913. Gracias a lo cual ganó una cátedra de patología en la Universidad de Heidelberg.   

La Primera Guerra Mundial fue para Jaspers de un decisivo impacto anímico. Así como, el fallecimiento de su maestro, Max Weber, destacado sociólogo alemán que negó el valor del determinismo económico marxista. Ambos eventos le llevaron a aceptar la cátedra de filosofía, en 1921. Con la llegada de Hitler al poder quedó fue del área de la enseñanza porque su esposa era de origen judío. Y solo logró volver al cargo en 1945. Karl Jaspers recibió múltiples reconocimientos como los premios Goethe (1947) y Erasmus (1959).

Contribuciones a la psiquiatría de Karl Jaspers

Jaspers no solo debatió el criterio utilizado para los diagnósticos, sino también la metodología clínica aplicada por los psiquiatras. Así, publicó una obra revolucionaria que planteaba una duda tremenda. ¿La paranoia se producía como consecuencia de variaciones biológicas o era más bien, una faceta de la personalidad? Y aportó una nueva metodología de estudio, que consistía en registrar la información biográfica de los pacientes. También se anotaban sus percepciones acerca de sus propios síntomas. Hoy esta técnica es parte fundamental de las prácticas modernas de psiquiatría.

Su texto de psicopatología general, goza de una merecida reputación dentro de la literatura psiquiátrica. Y muchos métodos de diagnóstico moderno, se originaron a partir de sus ideas. Según Jaspers, el criterio básico era considerar la forma antes que el contenido. Por ejemplo, al estudiar las alucinaciones de una persona es más importante analizar que las provoca, que las imágenes vistas. Asimismo, estableció una diferencia entre delirios de tipo primario (sin una razón aparente) y secundario. Los últimos dependen de los antecedentes del paciente.   

Contribuciones a la filosofía y la teología

La obra de Jaspers aborda constantemente la libertad individual y destaca las situaciones inusuales. Estas son condiciones que no se pueden resolver por medio de medidas habituales, y que llevan al ser humano al extremo de una forma inevitable. Jaspers las llamó situaciones límites y lo utilizó como un concepto existencialista a partir de 1919. También habló de la trascendencia, una idea que define la realidad existente más allá del tiempo y el espacio. Una opción que tienen las personas y que se opone a la resignación.

Esta filosofía de la trascendencia y el concepto de límites a la experiencia de los seres humanos, fue la manera en que Jaspers influyó sobre la teología moderna; a pesar de que siempre rechazó de forma explícita a las distintas corrientes religiosas existentes, incluida la fe relacionada con un Dios personal. Su trabajo se vio influido, considerablemente, por el cristianismo místico y las religiones orientales, en especial budismo. Sus debates con Rudolf Bultmann, teólogo protestante teutón, tenían la finalidad de demitologizar el cristianismo.         

Por último, las teorías de Karl Jaspers respecto a las relaciones humanas se aproximan a los principios psicoanalistas de Freud. En su opinión, las mismas deben ser analizadas como distintas manifestaciones de una “lucha amorosa” que oscila continuamente entre el afecto y el odio. Sus libros más importantes son extremadamente extensos y con un gran nivel de detalle. Esto suele desanimar a los lectores debido a su alta complejidad. Aunque también escribió obras de cierta brevedad que resultan más accesibles y entretenidas.