¿Cómo sobrevivir en un ambiente tóxico familiar?

Cómo vivir mejor en un ambiente tóxico familiar

Un ambiente tóxico se caracteriza por la presencia de conflictos no resueltos entre los integrantes de un núcleo familiar. Veamos cómo lidiar y salir de él.

El ambiente tóxico que enmarca las familias disfuncionales está regido por una serie de conductas dañinas que interrumpen la individualidad de sus integrantes. Esto trae como consecuencia, un clima emocional incómodo que dificulta la convivencia.

Puede que salir de este ambiente se complique aún más cuando se habla de la familia, puesto que a esta no se elige y se tiene que sobrellevar. Pero no se puede permitir que la situación sobrepase la integridad de las personas. Asimismo, es necesario saber identificar las características de un clima conflictivo para evitarlo.

Características de un ambiente tóxico

Este ambiente provoca sentimientos negativos y situaciones conflictivas que cercenan el desarrollo personal y coaccionan el bienestar psicológico de quienes están involucrados en él. Dentro de las características que presentan las familias tóxicas se encuentran:

Abuso o violencia familiar

La violencia intrafamiliar representa un problema altamente negativo para las personas, puesto que su impacto psicológico es grave. De hecho, quien sufra de abuso, de cualquier índole, puede que repita esa conducta con sus descendientes y con las personas que tiene a su alrededor. Insultos, palabras desestimadoras o golpes, son las acciones típicas de estos ambientes tóxicos.

Exceso de control

Verificar lo que las personas hablan, comen, los lugares que frecuentan, amistades o evitar que se relacionen socialmente puede ser una forma de control. Esto crea un estado de dependencia que conlleva a conflictos emocionales que evita que el desarrollo armónico del individuo.

Conflicto constante

La presencia de constantes peleas, que incluso se llegue a los golpes, genera un estado permanente de alerta y miedo. Es un desgaste, tanto físico como psicológico, que altera la convivencia.

La adicción de uno o varias personas de la familia

Este es el ingrediente fatídico que puede crear un estado psicótico en los miembros de un núcleo familiar. Provoca muchas dificultades económicas, emocionales, sociales y psicológicas.

Falta de comunicación

Una comunicación deficiente trae frustración e incomprensión, puesto que comunicarse es la mejor forma de expresar los sentimientos y emociones. Al no poder hacer llegar a los demás un mensaje claro, las personas pueden retraerse, guardar rencores o crearse escenarios de desavenencia.

Baja responsabilidad de los padres

La tarea de los padres es velar por el bienestar de los hijos y ofrecer un ambiente de seguridad. Cuando esto no es de esta manera, el individuo puede asumir un rol que no le corresponde a muy temprana edad, lo que trae como consecuencia, un salto en las etapas propias de la evolución psicológica de los mismos.

¿Qué hacer para alejarse de un ambiente tóxico?

Aunque para  muchos este círculo vicioso es muy difícil de romper, es posible lograrlo. Solo se deben seguir algunas de las siguientes recomendaciones:

Establecer límites

Puede que según el criterio y las perspectivas de cada miembro de la familia, que se desarrolla en un ambiente tóxico, esto sea una tarea cuesta arriba. No obstante, a la hora de tomar decisiones es mejor dejar de lado las opiniones y comentarios de quienes se encuentran inmersos en este clima de conflictos.

A su vez, se debe hacer valer, de manera armónica, el punto de vista de cualquier situación que deba discutirse. Los límites ayudan a que se ponga un alto a los maltratos, tanto psicológicos como al físico. Es aconsejable que se busque orientación con los especialistas en el área de psicología para establecer herramientas que ayuden a lograrlo.

Alejarse del ambiente tóxico

Aunque con esto no significa que hay que huir de los problemas, es cierto que la distancia ayuda a que las personas tengan otra perspectiva de su vida y tomen el control de ella. Por tanto, alejarse del área donde se desarrolla un ambiente tóxico es necesario.

Evitar perder el respeto

La impulsividad puede traer como consecuencia mayores dificultades. Cuando dos o más personas discuten, es muy probable que se pierda el respeto. Se llega a un clímax de furia en donde las palabras y acciones son hirientes y complican aún más la situación. Es por ello, que es recomendable mantener la calma y afrontar las discusiones con serenidad.

Se pueden aplicar otras estrategias, tales como: no responder ante el conflicto, expresar el sentir con alguien de confianza, pasar tiempo con personas que generen sensación de bienestar y finalmente alejarse de situaciones conflictivas.

En resumen, puede que las personas crezcan en un ambiente tóxico, pero si aplican los consejos antes mencionados, es muy probable que salgan de esta situación con éxito. El vivir bien es decisión propia y nadie puede mutilar este derecho.