Stephen Covey | Frases sobre hábitos de la gente altamente efectiva

Las mejores frases de Stephen Covey

Stephen Covey fue un norteamericano influyente dedicado a la promoción de principios básicos para el crecimiento personal y organizacional. Sus libros son prácticos, útiles y amenos

Stephen Covey (octubre de 1932 – julio de 2012) fue un famoso conferenciante, profesor y escritor estadounidense. Además, es el autor de uno de los libros de autoayuda más conocidos en el mundo entero “Los siete hábitos de la gente altamente efectiva”. Una obra de gran inspiración para quienes buscan tener una gestión eficiente de su tiempo. Y que no solo es útil para el individuo, de manera personal, sino también para las organizaciones y las empresas.

Antes de publicar esta obra, Covey, que además era licenciado en administración de empresas, enseñaba en la Brigham Young University de Utah. Entre sus logros se cuenta haber tenido 9 hijos y 52 nietos, hazaña que le hizo merecedor de un premio a la paternidad en el año 2003. Fue el fundador del Centro Covey de Liderazgo, que en 1997 cambió su nombre a Franklin Covey Company. Esta firma proporciona cursos y seminarios, para grupos particulares y corporaciones, sobre gestión de negocios y del tiempo, además de manejo de la productividad.

Stephen Covey pertenecía a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, religión conocida como mormonismo. De acuerdo a su formación religiosa, dedicó la mayor parte de su exitosa vida a la transmisión de los preceptos en los cuales creía. Así, sus libros tratan de vivir y llevar adelante organizaciones y grupos familiares basándose en principios que él consideraba que eran de carácter universal. Estos son aceptados por las principales religiones del mundo; así como, por los sistemas éticos de cada nación.        

Sinopsis de la obra “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva”

Aparte del libro ya mencionado, Covey escribió “Liderazgo centrado en principios”, “Meditaciones diarias para las personas altamente efectivas”, “Primero lo primero”, “El octavo hábito”, “La tercera alternativa” y otros. Veamos un resumen de esos 7 hábitos que pueden incrementar notablemente nuestra efectividad como personas y como profesionales:

  1. Proactividad. Cultivar dicho principio nos permite adelantarnos a los acontecimientos y no presentar, simplemente, una respuesta automática a los estímulos. Esta es una capacidad que nos distingue de los animales. Así, no tenemos que actuar por instinto, sino que podemos ser los artífices de nuestro propio destino.
  2. Comenzar con el fin en la mente. Establezcamos la misión y la visión antes de ejecutar ninguna acción. Planteemos objetivos que nos permitan definir la ruta óptima para conseguirlos. Si de entrada sabemos lo que queremos, será más fácil que tengamos éxito.
  3. Primero lo primero. A veces lo urgente quita tiempo y energías de lo que es verdaderamente importante. Concentrémonos en aquello que da sentido a nuestra existencia. Aprendamos a establecer prioridades y a respetarlas, para poder alcanzar los objetivos planteados.
  4. Ganar-ganar. No es necesario que unos pierdan para que otros ganen. En la vida, con la actitud y las acciones correctas todos pueden triunfar. La razón es que hay abundancia de recursos, materiales y de otros tipos; solo debemos cambiar esa mentalidad mezquina que a veces nos controla.
  5. Entender primero y ser entendido después. Esta es la base de una relación basada en el respeto, la comprensión y la tolerancia. Cuando buscamos entender primero, somos capaces de manejar mejor las comunicaciones personales y de negocios, las ideas fluyen y se logran los acuerdos.
  6. Sinergia. Parte del principio de que “el todo es mayor que la suma de las partes”. En la diversidad hay beneficio e innovación, porque en el grupo circulan ideas mejores que las que puede generar un solo individuo. Gracias a esto sabemos que el trabajo en equipo es la forma óptima de hacer las cosas. 
  7. Afilar la sierra.  En ocasiones hay que hacer un alto y descansar, buscar nuevas alternativas o simplemente, pedir ayuda. Renovarnos, interna y externamente, nos ayuda a llevar existencias más equilibradas. Esto se traduce en una mayor eficacia en cada uno de los roles que gestionamos.

Frases célebres de Stephen Covey

Veamos algunos de los pensamientos que nos ha legado este excelente motivador:

La tecnología reinventará los negocios, pero las relaciones humanas seguirán siendo la clave del éxito”.

Démosle a cada uno su justo valor. 

Ésta es una de las mayores comprensiones en el campo de la motivación humana: las necesidades satisfechas no motivan”.

Solo los deseos insatisfechos nos mueven a actuar y a luchar.

Una vez que se ha identificado un objetivo atractivo, moverse hacia él es agradable, y no hacerlo es incómodo”.

Por tanto, este tiene que ser el primer paso en el desarrollo de cualquier proyecto: definir una meta motivadora.

Muchas personas padecen tratando de lograr una vida balanceada porque no han pagado el precio de decidir lo que es realmente importante para ellos”.

Así, el paso No 1 es definir las prioridades.

La manera en la que vemos el problema es el problema”.

A veces con cambiar el enfoque es suficiente para comenzar a vislumbrar la solución.

Si dos personas tienen la misma opinión, una de ellas es innecesaria”.

De nuevo vemos el valor que existe en la diversidad. Mientras más aportes haya, mejores serán los resultados.

Por último, Stephen Covey fue distinguido con el reconocimiento de 7 doctorados honoris causa y recibió muchos otros premios. Entre ellos el Thomas More College Medallion, por sus inestimables servicios y favores a la humanidad. En 1999, fue elegido como el conferenciante del período. Y en 1994, le entregaron el Premio Sikh, que lo acreditaba como hombre internacional del año. Sus recomendaciones para mejorar el desempeño personal y la gestión empresarial son seguidas a todo lo largo y ancho del mundo.