Estos son los síntomas de la falta de magnesio en el cuerpo

Deficiencia de magnesio

El magnesio es un mineral esencial para el funcionamiento de nuestro organismo. Participa en más de 300 reacciones bioquímicas, como la producción de energía, la contracción muscular, la transmisión nerviosa, la regulación del ritmo cardíaco y la formación de huesos y dientes.

Además, tiene un papel importante en el equilibrio de otros minerales, como el calcio, el potasio y el sodio.

¿Qué causa la falta de magnesio?

La falta de magnesio, también llamada hipomagnesemia, se produce cuando los niveles de este mineral en la sangre son inferiores a los normales. Esto puede deberse a varios factores, como:

  • Una dieta pobre en alimentos ricos en magnesio, como los frutos secos, las legumbres, los cereales integrales, las verduras de hoja verde y el chocolate negro.
  • Una mala absorción intestinal, causada por enfermedades inflamatorias, celiaquía, enfermedad de Crohn o cirugía bariátrica.
  • Una pérdida excesiva de magnesio por el riñón, debido a enfermedades renales, diabetes, alcoholismo o el uso de ciertos medicamentos, como los diuréticos, los antibióticos o los antiácidos.
  • Un aumento de las necesidades de magnesio, por ejemplo en situaciones de estrés, embarazo, lactancia o ejercicio intenso.

¿Qué síntomas produce la falta de magnesio?

La falta de magnesio puede manifestarse con una serie de síntomas que afectan a diferentes sistemas del cuerpo. Algunos de los más comunes son:

  • Fatiga, debilidad y falta de energía.
  • Calambres, espasmos y temblores musculares.
  • Arritmias, taquicardia y palpitaciones cardíacas.
  • Hipertensión arterial y alteraciones vasculares.
  • Dolor de cabeza, migraña y vértigo.
  • Ansiedad, irritabilidad, depresión y alteraciones del sueño.
  • Náuseas, vómitos, pérdida de apetito y estreñimiento.
  • Osteoporosis, fracturas y caries dentales.

¿Cómo se puede prevenir y tratar la falta de magnesio?

La mejor forma de prevenir y tratar la falta de magnesio es seguir una dieta equilibrada y variada que incluya alimentos ricos en este mineral. Algunos ejemplos son:

  • Frutos secos: almendras, nueces, pistachos, avellanas, etc.
  • Legumbres: lentejas, garbanzos, alubias, soja, etc.
  • Cereales integrales: arroz integral, avena, quinoa, etc.
  • Verduras de hoja verde: espinacas, acelgas, kale, etc.
  • Chocolate negro: con al menos un 70% de cacao.
  • Semillas: chía, lino, sésamo, calabaza, etc.

También se puede recurrir a suplementos de magnesio bajo prescripción médica si existe una deficiencia severa o una causa que impida obtener suficiente magnesio a través de la dieta.

Sin embargo, no se debe abusar de estos suplementos ni automedicarse sin consultar con un profesional sanitario.

El magnesio es un mineral imprescindible para nuestra salud. Por eso es importante conocer sus funciones, sus fuentes alimentarias y sus síntomas de deficiencia.

Así podremos prevenir y corregir posibles carencias que puedan afectar a nuestro bienestar físico y mental.