El colesterol es una sustancia grasa que se encuentra en el organismo y que cumple funciones importantes, como la producción de hormonas y la formación de membranas celulares.
Sin embargo, cuando el nivel de colesterol en la sangre es demasiado alto, puede causar problemas de salud, como el aumento del riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
El colesterol alto se puede deber a varios factores, como la genética, la alimentación, el sedentarismo, el tabaquismo, el consumo de alcohol o algunas enfermedades.
El colesterol se divide en dos tipos: el colesterol HDL (bueno) y el colesterol LDL (malo). El primero ayuda a eliminar el exceso de colesterol del organismo, mientras que el segundo se acumula en las paredes de las arterias y las obstruye.
¿Cómo se manifiesta el colesterol alto?
El colesterol alto no suele presentar síntomas evidentes, por lo que muchas personas lo desconocen hasta que sufren alguna complicación. Por eso, es importante realizarse análisis de sangre periódicos para medir los niveles de colesterol y tomar medidas preventivas si son elevados.
Sin embargo, hay algunos signos que pueden alertar de la presencia de colesterol alto, como la aparición de xantelasmas o xantomas. Estos son depósitos de grasa que se forman bajo la piel, especialmente alrededor de los ojos o en los párpados. También pueden aparecer en otras zonas del cuerpo, como los codos, las rodillas o los tendones.
¿Qué relación hay entre el colesterol alto y las piernas?
Otro signo preocupante que puede indicar un nivel alto de colesterol es la presencia de dolor, calambres, hormigueo o entumecimiento en las piernas. Estos síntomas pueden deberse a la aterosclerosis, es decir, al endurecimiento y estrechamiento de las arterias por la acumulación de placas de colesterol.
La aterosclerosis afecta al flujo sanguíneo y puede provocar isquemia o falta de oxígeno en los tejidos. Cuando esto ocurre en las piernas, se denomina enfermedad arterial periférica (EAP). La EAP puede causar complicaciones graves, como úlceras, infecciones o gangrena, que pueden requerir la amputación de la extremidad afectada.
¿Qué se puede hacer para prevenir o tratar el colesterol alto?
El primer paso para prevenir o tratar el colesterol alto es adoptar hábitos de vida saludables, como seguir una dieta equilibrada, baja en grasas saturadas y trans y rica en fibra, frutas y verduras; practicar ejercicio físico regularmente; evitar el tabaco y el alcohol; y controlar el peso y la presión arterial.
Además, es conveniente consultar con el médico si se tienen antecedentes familiares de colesterol alto o si se presentan alguno de los signos mencionados.
El médico podrá realizar un diagnóstico adecuado y recetar medicamentos para reducir el nivel de colesterol si es necesario. Estos medicamentos suelen ser estatinas, fibratos o ezetimiba.
El colesterol alto es un factor de riesgo para la salud cardiovascular que se puede prevenir y tratar con medidas sencillas.
No obstante, si se observa algún signo preocupante en las piernas o en otras partes del cuerpo, se debe acudir al médico lo antes posible para evitar complicaciones mayores.
