Estas son las razones de la falta de entusiasmo en la vida

Falta de entusiasmo

¿Estás sufriendo una falta de entusiasmo en tu vida? Si es así, existen varias razones para esto. El entusiasmo y la motivación están vinculados a tus metas en la vida. La gente se siente más entusiasmada cuando hace cosas que la satisfacen. Son cosas que implican un pequeño desafío, disfrute y energía.

Verás, algunas cosas en la vida simplemente nos hacen muy felices, y esa es una felicidad que no está necesariamente asociada con la aceptación por parte de los demás.

Cuando perdemos nuestro entusiasmo, la vida parece diferente. No es tan interesante ni emocionante como antes. ¿Cuáles son estas razones más profundas de la falta de entusiasmo?

¿Por qué ya no me siento entusiasmado?

¿Te haces esta pregunta constantemente? Hay muchos momentos en nuestras vidas en los que damos un paso atrás y nos damos cuenta de que todo ha perdido su brillo. La vida se empieza a sentir como una tarea forzada.

Es posible que tengamos tantas cosas que nos gustaría hacer, pero en cambio no hacemos nada. ¿Por qué está pasando esto?

1. Asumimos demasiadas responsabilidades

Esto puede sonar extraño, pero contribuye más de lo que crees a tu falta de entusiasmo. Si comienzas a sobrecargarte de trabajo, al principio puedes sentirte lleno de energía y preparado, pero no será por mucho tiempo.

Una vez que hayas completado una parte del trabajo, de repente te darás cuenta de que todavía queda un largo camino por recorrer hasta que hayas terminado. Cuando esto sucede, es posible que te sientas triste y tengas dificultades para completar todo. Tu motivación se agotará e incluso si logras hacerlo todo. De esta manera te sentirás menos entusiasmado con la próxima cosa que quieras hacer.

2. No tenemos motivos claros para las cosas que hacemos

Hacemos cosas todos los días, ya sea nuestro trabajo, nuestra tarea o nuestros pasatiempos. Pero, ¿por qué hacemos estas cosas? Bueno, la mayoría de las personas trabajan para ganar dinero o porque sienten pasión por su carrera.

Hacemos las tareas del hogar para mantener ordenados nuestras casas. Pero, ¿por qué tenemos pasatiempos específicos? ¿Por qué pintamos, escribimos poemas y hacemos videos? Una vez más, podría tratarse de dinero, pero por lo general, hay algo de pasión en nuestros pasatiempos.

Y esta es la parte desafortunada: si no tenemos una razón clara para las cosas que hacemos, eventualmente perderemos la motivación para hacer estas cosas, incluso las cosas divertidas.

3. Te da miedo pensar en tus objetivos

Has decidido lo que quieres de la vida, pero de repente un día te das cuenta de que tus sueños y metas son enormes. Son tan complejos, exigentes, y grandes que te abruman. Y si permaneces abrumado y asustado, pierdes el entusiasmo por las cosas que quieres hacer.

4. No tener una red de apoyo ocasiona falta de entusiasmo

Es difícil ser entusiasta cuando nadie te apoya. Lo que esto quiere decir es que si estás rodeado de personas negativas que siempre te subestiman, esta negatividad también puede afectarte. Puede que hayan envenenado tu entusiasmo.

5. No te animas a pedir ayuda cuando la necesitas

A veces, completar algunas tareas requiere algo más que voluntad y esfuerzo. Tal vez cuando encuentras algo que quieres lograr, pero te das cuenta de que necesitarás ayuda, puede que simplemente te des por vencido y decidas olvidarte de ello. Pierdes tu entusiasmo por este proyecto simplemente porque tienes miedo de que nadie quiera ayudarte.

6. Sientes que no vales la pena y eso causa una falta de entusiasmo

Muchas veces, perdemos nuestro entusiasmo por algo porque sentimos que no merecemos las consecuencias positivas de algo que logramos. Es difícil encontrar motivación si no nos sentimos dignos. Si sientes que no lo vales, esa puede ser la razón por la que no puedes hacer nada. Es hora de trabajar en tu autoestima o perdonarte a ti mismo por cualquier error que hayas cometido.

¿Qué podemos hacer para lidiar con la falta de entusiasmo?

Si asumes demasiado trabajo o responsabilidades, siéntate y escribe todo lo que necesitas hacer durante el día, y comienza ahora mismo. Analiza tu lista y sé honesto contigo mismo. ¿Es posible hacer estas cosas sin presionarte demasiado? Si no es así, empieza a reducir un poco el tiempo hasta que te sientas cómodo.

 Si no sabes por qué estás tratando de hacer algo, es hora de hacer un balance de tus «por qué» y ser honesto contigo mismo. Encuentra el motivo de tus acciones, y esto te impulsará a seguir adelante

Si sientes que tu objetivo es demasiado grande, divídelo en pedazos e intenta completarlo poco a poco. Esto facilitará enormemente el logro de tu objetivo.

¿No recibes ayuda? Tal vez no quieras creerlo, pero definitivamente hay personas que invertirían en ti. Pero primero debes invertir en ti mismo aceptando que no todos en tu vida estarán interesados ​​en las mismas cosas que te interesan.

No dudes en pedir ayuda. Nadie en este planeta ha pasado toda su vida sin necesitar ayuda en algún momento. No eres una excepción. Entonces, ¿la clave? Debes repeler ese orgullo y ser humilde.