Cómo ser más fuerte emocionalmente tras una separación

Cómo volverse más fuertes tras una separación

 Aunque en estos momentos parezca que el dolor es insufrible, sí podrás recuperarte. El proceso del duelo después que sufrimos una dolorosa separación, tiene su similitud en el que se prosigue cuando hemos sido víctima de alguna lesión muscular.

Tras una separación de pareja, cuando la relación no tiene manera de continuar, el mundo se derrumba para muchas personas. Y no pocos son los que tienen problemas importantes de salud mental después de una separación.

Aunque está muy arraigado en nuestra percepción del dolor el viejo adagio que reza “el tiempo es el mejor remedio para los males del corazón”, también es cierto que ese tiempo puede volverse indefinido; si no tomamos cartas en el asunto para salir de esa situación.

También vale la pena aclarar que una ruptura de pareja no es la única situación en la que podemos sentir una separación o dolor por la pérdida, por ejemplo, cuando nos despedimos de un ser querido, porque se va muy lejos y ya no podremos verlo, o cuando la muerte nos separa abruptamente de aquellos a quienes amamos, la separación nos puede dolor inmensamente, pero de todas estas situaciones podemos volver más fuertes emocionalmente.

La separación y el duelo

Si se quiere superar exitosamente una situación de ruptura y poder asimilar el duro golpe emocional que hemos sufrido, debemos transitar por el camino del duelo.

Esto nos va a permitir desahogar todo ese torrente de emociones que, de otra forma, permanecerían dentro de nosotros haciéndonos aún más daño.

Es importante aclarar que el duelo no es un proceso indefinido, pero que tampoco podemos establecerle “tiempo de duración”; ya que los seres humanos somos, de alguna manera, esclavos de nuestras emociones.

 Si el proceso de duelo no se realiza correctamente, puede convertirse en una trampa emocional en la cual nuestra vulnerabilidad; nos haga propensos a ser heridos nuevamente y quizás con mayor intensidad.

Hacerlo de la manera correcta, recurriendo al apoyo psicológico de ser necesario y utilizando las estrategias más idóneas; nos llevará a superar exitosamente la etapa del duelo.

De esa manera, podremos reiniciarnos en una nueva etapa a nivel personal y avanzar hacia ella emocionalmente fortalecidos.

¿Y qué hacemos con las emociones?

Las lágrimas siempre son la vía más adecuada para drenar las emociones que nos puede producir la ruptura de una relación.

Es una especie de vía de escape donde se van con ellas la rabia, el desconsuelo, la desesperación y la impotencia.

Ahora bien, en muchas ocasiones las lágrimas no bastan para manifestar todo lo que estamos sintiendo.

Si tenemos un enfado muy profundo, podemos buscar un lugar discreto y darle rienda suelta a ese nudo que nos atenaza la garganta; gritando a todo pulmón nuestro dolor.

En la medida que dejemos que nuestras emociones fluyan, de la misma manera nos iremos fortaleciendo anímica y emocionalmente.

Por ello, no debemos hacer más resistencia para que iniciemos de una vez el proceso para superar sin mayores heridas lo acontecido.

Estrategias para superar una separación y salir fortalecidos

Está en nosotros procurar que el proceso del duelo y la tristeza queden en el pasado y poder seguir adelante con nuevos bríos.

Para ello, estos consejos pueden ser de utilidad:

1. Enfócate en el porvenir

De nada vale llorar sobre la leche derramada, ya que eso no la devolverá al vaso.

Bajo esa perspectiva, debemos enfocar nuestra actitud y dejar de lamentarnos en el mantra auto destructivo del “por qué a mí”.

Es aquí donde la resiliencia va a jugar un papel muy importante, es decir: !Volver a comenzar aprendiendo de los errores!

2. Reactiva tu vida social

Suele suceder que las personas se involucran demasiado en una relación,  y comienzan a dejar de lado amistades de toda la vida, compañeros de aventuras y amigos incondicionales.

De igual forma, dejan de lado hasta su vida social, dedicándose en cuerpo y alma a la relación de pareja.

Eso son los factores precisamente que hacen más dura una separación.

Para sanar heridas, hay que reactivar esa vida social y reencontrarte con las personas de tu entorno.

Quizás allí te podrás encontrar con la oportunidad de iniciar una nueva relación.

3.  No adoptes el papel de víctima

Debes convertirte en un ave fénix y resurgir de tus cenizas.

No pierdas el tiempo en seguir lamentándote porque sería reactivar el duelo, y te nublaría la visión de las cosas nuevas y positivas que se te avecinan.

Mantén siempre la actitud de ganador. Si surgió una separación, quédate con el lado bueno que salió de ella, y lo malo que quede atrás como un triste recuerdo.

 Una separación no es el fin del mundo. Es tan solo una vivencia más de las que tocará experimentar a lo largo de tu existencia y así debes procurar racionalizarlo.