Aún no está del todo claro cómo se desarrolla o las causas del trastorno obsesivo-compulsivo. Sin embargo, los estudios familiares y de gemelos muestran que, como ocurre con la mayoría de las enfermedades mentales, existe una carga hereditaria en el TOC.
Causas del trastorno obsesivo compulsivo
Para que se desencadene el trastorno obsesivo compulsivo, sin embargo, se deben agregar factores adicionales. Estos incluyen, por ejemplo, experiencias de la infancia que han llevado a una persona a ser insegura y que necesita un mayor control.
La mayoría del trastorno obsesivo-compulsivo está precedido por una experiencia particularmente estresante o crisis de la vida. Con la ayuda del ritual obligatorio, la persona afectada recupera la sensación de seguridad perdida. La incertidumbre externa es compensada por una estructura interna. Pero esta seguridad es engañosa: si el ritual no se lleva a cabo, el miedo vuelve con poder.
Lóbulo cerebral hiperactivo
Ahora se sabe que en las personas con trastorno obsesivo compulsivo, el lóbulo frontal del cerebro está hiperactivo. Entre otras cosas, controla los llamados ganglios basales: son estructuras cerebrales que son responsables de los procesos motores.
Esta hipótesis se confirma por el hecho de que las personas cuyos ganglios basales se ven afectados por tumores o lesiones en la cabeza a menudo desarrollan trastornos obsesivo-compulsivos. Además, en personas con TOC, el equilibrio de la serotonina en el cerebro parece estar perturbado. Muchos pacientes usan medicamentos que aumentan los niveles de serotonina.
Las influencias ambientales
Junto con la personalidad y las condiciones biológicas, la educación puede contribuir al desarrollo del trastorno obsesivo-compulsivo. Los niños que están más ansiosos también están inquietos por el comportamiento sobreprotector de sus padres.
Aprenden de los padres para evitar situaciones amenazantes en lugar de enfrentarlos. Incluso los padres que son muy críticos con los niños o que tienen afirmaciones perfeccionistas pueden promover el TOC en sus hijos.
También la influencia del ejemplo puede ser un factor desencadenante, como lo es el caso de los niños expuestos ante los síntomas del trastorno obsesivo compulsivo de alguno de sus padres.
Las causas del trastorno obsesivo compulsivo a menudo son eventos estresantes. Cualquier demanda excesiva crea el deseo de control. Sin embargo, cuando la persona no puede hacer frente a la situación, los pensamientos compulsivos y las compulsiones actúan como una distracción. Por otro lado, los pensamientos y las acciones compulsivas dan a las personas que están ansiosas y tienen una mayor necesidad de seguridad la ilusión de que básicamente son capaces de controlar eventos incontrolables. Por ejemplo, esperan poder evitar accidentes a través de ciertos rituales.
Trastorno obsesivo-compulsivo: exámenes y diagnóstico
Con frecuencia, los afectados se avergüenzan de sus compulsiones, porque los perciben como sin sentido. Es difícil para ellos confiar en un psicólogo o un médico. Sin embargo, los pacientes deben ser conscientes de que los pensamientos y acciones extrañas son parte de un trastorno obsesivo-compulsivo y muchas personas luchan con las mismas o similares limitaciones. Sobre todo, las restricciones usualmente no desaparecen por sí mismas. Por lo tanto, es importante ser abierto y honesto con el médico o el psicólogo para que pueda identificar y tratar el trastorno obsesivo-compulsivo.
Para el diagnóstico del trastorno obsesivo compulsivo, el terapeuta se orienta a sí mismo a la clasificación ICD-10 de los trastornos mentales. Los siguientes criterios deben aplicarse:
- Los afectados tienen pensamientos obsesivos o comportamiento coercitivo (o ambos) la mayoría de los días durante un período de al menos dos semanas.
Las obsesiones y acciones muestran las siguientes características:
- Los afectados saben que los pensamientos / acciones son suyos y no son generados por influencias externas.
- Los pensamientos / acciones se repiten constantemente, se perciben como desagradables y se los reconoce como exagerados o sin sentido.
- Los afectados intentan resistir los pensamientos obsesivos o acciones.
- La ejecución de los pensamientos o acciones compulsivos se siente el afectado como desagradable.
- Los afectados sufren este trastorno en todos los ambientes donde se mueven, en su trabajo, en su hogar y con su familia.
En una primera entrevista, el médico o terapeuta determinará preguntando si los criterios anteriores se aplican a la persona. Las siguientes preguntas podrían también ser realizadas por el especialista:
- ¿A menudo tienes pensamientos desagradables que se imponen sobre ti?
- ¿Sientes una presión interna para llevar a cabo ciertas acciones una y otra vez?
- ¿Sientes estos pensamientos o acciones como sin sentido?
- ¿Te preocupa que algo malo pueda pasar si no tomas medidas?
- ¿Necesitas mucho tiempo para las actividades diarias?
