El Qi Gong proviene de la Medicina Tradicional China y se basa en que la energía vital, el Qi, fluye en el cuerpo a través de ciertas vías, cada una de las cuales está asignada a un sistema de órganos, también llamados meridianos. Los puntos de acupuntura también se encuentran en estos canales.
El flujo libre de Qi es el requisito previo para el buen funcionamiento de todos los sistemas de órganos y para el equilibrio armonioso de los humanos. Una congestión en estos canales, que se manifiesta en ciertos puntos, puede provocar enfermedades. Con el Qi Gong se puede regular tu propio balance energético.
El Qi Gong consiste en movimientos corporales lentos y fluidos que están asociados con ejercicios de respiración y concentración mental. Los ejercicios se pueden utilizar para mantener la salud y también para la curación de enfermedades. Es importante que estos ejercicios se realicen regularmente. Cuanto más se practiquen, más efectivos resultarán.
El origen y desarrollo del Qi Gong o Qigong
El Qi Gong se originó en la antigua China. El Qi Gong se practicó hace miles de años, no solo para encontrar el centro físico, sino también como un ejercicio preparatorio para las artes marciales para desarrollar la concentración necesaria.
Después de muchos años en los que este era el único uso, ganó más y más prestigio dentro de la medicina china y también empezó a usarse en el área general. Ahora el Qi Gong es uno de los métodos alternativos de curación que puede prescindir completamente de medicamentos, medicamentos homeopáticos u otras ayudas.
Las limitaciones físicas, la depresión y la ansiedad son frecuentes entre los adultos mayores. El ejercicio leve a moderado puede promover la salud física y psicológica y reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Qigong, un tipo de ejercicio de la medicina tradicional china, ha demostrado efectos beneficiosos sobre la capacidad física y la salud mental en adultos con afecciones crónicas. [³]
Proceso y modo de uso
Implementación y funcionamiento del Qi Gong. En la medicina china, el cuerpo humano siempre se ha visto como una unidad. Incluso si los síntomas son claramente reconocibles, no se reducen a una sola enfermedad, porque el ser humano siempre está afectado por completo.
Por lo tanto, el Qi Gong se ha convertido en una de las bases para el tratamiento de muchas enfermedades, por supuesto en combinación con la medicación correspondiente o las medidas médicas. El Qi Gong se compone de dos términos. Qi, que significa flujo o energía. Y gong, que es trabajo o habilidad.
Con el Qi Gong, se debe lograr un control físico completo y todos los procesos deben ser fluidos, sin detener o pausar el movimiento. Este concepto de movimiento recibió su nombre del río Qi, que ilustra el simbolismo de la uniformidad.
A través de varias influencias religiosas durante milenios, como el budismo, este antiguo arte chino fue refinado una y otra vez y reforzado con el conocimiento recién adquirido. Se permiten movimientos similares a las artes marciales siempre que la movilidad y la energía lo permitan.
Es una especie de cámara lenta, ya que los movimientos no son espasmódicos, sino lentos, constantes y fluidos. Esto fortalece los músculos y entrena la coordinación y el equilibrio.
Ejercicios y movimiento
El Qi Gong trabaja con una combinación de movimientos y otros ejercicios físicos que se han podido separar en los últimos años. Esto creó la base para el entrenamiento autógeno o la meditación.
El Qi Gong combina todos estos componentes en uno. Las transiciones o la unión de todos los ejercicios difícilmente pueden reconocerse con fluidez en el proceso. El Qi Gong debe hacerse en un ambiente libre tranquilo y espacioso. Ya sea al aire libre o en medio de una habitación grande. Usa ropa cómoda que permita una gran libertad de movimiento. La presión del tiempo también debe ser excluida.
Debe ser un momento que no esté determinado por plazos u otras obligaciones. Los ejercicios comienzan con una respiración concentrada. Esto significa eliminar todo el estrés acumulado del día y encontrar un descanso óptimo.
Ciclos y relajación
Entonces comienza un ciclo de movimiento. Se puede practicar el balanceo de las piernas o la tensión controlada de ciertas partes musculares y su posterior relajación. Quienes tienen problemas para coordinar estos procesos sin guía pueden usar ciertas reproducciones de sonido que simulan un viaje sensorial o también se usan para la relajación muscular progresiva.
A través de estos viajes guiados, todos los procesos pueden tener lugar en una secuencia determinada. Al aumentar la concentración, también podemos conectarnos a la meditación. En este contexto, el viaje sensorial puede terminar en una forma relajante después del ciclo de movimiento y la meditación.
Es importante que cada ciclo se realice a tu propio criterio hasta que puedas sentir la relajación y el flujo de energía.
A través de la relajación y tensión alternadas, el cuerpo puede recuperar nuevas fuerzas, la presión arterial se normaliza, te conectas con tu propia mente y quizás encuentres una solución en la meditación a un problema que nunca podrías resolver bajo tensión. Después de finalizar el ejercicio, no se recomienda regresar al estrés de la vida cotidiana, sino descansar un poco.
Los medios como la televisión o la radio también deben evitarse un poco para que la relajación no se evapore. Si practicas regularmente estos ejercicios, puede crear una alternativa al entrenamiento y, sobre todo, solucionar algunos problemas o signos de una enfermedad sin necesidad de asistencia médica.
¿Cómo se puede emplear el Qi Gong como terapia?
El Qi Gong también puede ser útil en el contexto de la terapia y promover el proceso de curación.
Según los resultados de algunos estudios, el Qi Gong puede considerarse como una de las terapias complementarias acompañadas de medicina convencional para tratar a los pacientes con disfunción autónoma o ansiedad. [¹]
El Qi Gong puede ayudar para las siguientes situaciones o condiciones:
- El estrés.
- Hipertensión arterial.
- Dificultad para concentrarse.
- Falta de capacidad para descansar.
- Depresión.
El Qi Gong puede ser una terapia muy útil, especialmente para enfermedades como la fatiga crónica. Sin embargo, los síntomas medibles físicamente, como la presión arterial alta, deben ser revisados por un médico a menos que puedan compensarse con este método.
El Qi Gong promueve y fortalece:
- Bienestar corporal.
- Conocimiento propio.
- Balance energético.
- Efecto de relajación.
- Fortalecimiento muscular y el entrenamiento de los músculos.
- Paciencia y reducción de la ansiedad.
Riesgos y peligros de su práctica
El Qigong no representa riesgos para la salud de las personas, su práctica puede adaptarse a las condiciones físicas variables de los practicantes.
Esta forma de método de curación alternativa no requiere ningún medicamento u otro medio. Es adecuado para todos los grupos de edad y se puede adaptar a las habilidades del individuo, especialmente en las secuencias de movimiento.
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