¿Por qué tenemos miedo a decir lo que sentimos?

Miedo a decir lo que sentimos o compartir nuestros sentimientos

El tema de este artículo es dar una comprensión simple sobre cómo se manifiesta el miedo a expresar nuestros sentimientos y de dónde proviene el miedo a mostrarlos o compartirlo con los demás.

Decir lo que sentimos, mostrar emociones y más aún los sentimientos supuestamente débiles que tenemos, es una práctica que se realizar cada vez con menos frecuencia. Muchos temen mostrar sus verdaderos sentimientos porque temen que molestarán o atacarán a otros.

Miedos frecuentes a decir lo que sentimos

Uno podría sentirse vergonzoso en el grupo de amigos, si admite que tiene miedo, por ejemplo, a determinados animales o algo que parecería absurdo a primer instancia.

Se podría considerar que no es cool admitir que nos causa mucho dolor terminar nuestra relación sentimental con nuestra pareja. Los temores a que se burlen, y consideren débil, más aún en el caso de los hombres, es muy frecuente.

Por eso pensamos que es mejor no mostrar cómo sentimos. Por lo tanto, uno evita los sentimientos, que podrían interpretarse como debilidad, no mostramos ningún signo y actuamos como si estuviéramos por encima de las cosas y tuviéramos todo bajo control.

Eso es genial y es recompensado por los demás. En última instancia, no mostrar las emociones es una autoprotección para evitar el dolor y el rechazo. Y como la mayoría de nosotros tememos el rechazo, muchas personas no se abren, y cuanto más a menudo han experimentado esa sensación de ponerse vulnerables al exponer lo que sienten, más cerradas e inexpresivas se vuelven.

Sin embargo, esto no queda sin consecuencias negativas para nosotros. Cuando expresamos nuestros sentimientos con nosotros mismos, cuando no tenemos la capacidad o el coraje para hablar con los demás al respecto, nos encerramos. Además, actuamos con otras personas como inaccesibles, fríos emocionales, apartados, y a veces, podemos parecer incluso arrogantes.

¿De dónde viene el miedo a mostrar emociones?

Nuestros padres nos transmiten por reconocimiento, rechazo, indiferencia, castigo o recompensa, si los sentimientos pueden ser expresados y en qué forma podemos expresarlos.

Si se nos ha enseñado que es incorrecto mostrar ciertos sentimientos cuando se los castiga por ciertas expresiones de emoción, entonces es comprensible que como adultos tenemos dificultades para mostrar esos sentimientos.

Como un niño, si te han presentado como demasiado sensible o como un «llorón», entonces como adultos ya no mostramos si nos sentimos heridos y débiles, en cambio, escondemos esos sentimientos supuestamente malos. Pero incluso como adolescentes y adultos podemos acostumbrarnos a no sentir nada debido a muchas decepciones y lesiones.

Y una razón muy común por la cual las personas no muestran sentimientos es porque temen que otros puedan descubrir su verdadera naturaleza, y le tienen más miedo que a cualquier otra cosa.

Temen que otros puedan ver a través de ellos y ver por lo que creen que son, por ejemplo, un fracaso, una mala persona que solo tiene defectos. Tienen fuertes dudas sobre sí mismos y sentimientos de inferioridad y, por lo tanto, temen revelar algo sobre ellos mismos.

La capacidad de mostrar emociones es muy importante para vivir en pareja

Muchas veces no importa cuánto cuidado pongas en no mostrar tus sentimientos, una persona que nos conoce podría darse cuenta por ciertas actitudes, y conocer lo que nosotros mismos no nos atrevemos a decir.

Aparte del hecho de que no es posible ocultar completamente nuestros sentimientos de los demás, tampoco es deseable. Especialmente en una relación de pareja o amistad, es muy importante poder hablar sobre nuestros sentimientos y decir lo que sentimos.

¿Cómo se supone que el otro puede acercarse a nosotros, estar cerca de nosotros, comprender nuestros sentimientos si no los expresamos?

Compartir emociones, buenas y malas, nos ayuda a conectar con los demás. Además, es liberador y es bueno tener alguien en quien confiar. Te sientes vivo y vives más libre.

Si tienes que controlarte constantemente para no revelar nada acerca de ti, entonces cuesta mucha energía. Como resultado, siempre estás tenso y nervioso, y no puedes comprender a los demás con facilidad ni sabes cómo acercarte a ellos.

¿Cómo aprender a mostrar más de tus sentimientos?

Para superar el miedo a decir lo que sentimos, debemos comenzar con nosotros mismos y nuestra actitud hacia nosotros mismos.

Porque solo tememos ser rechazados por un sentimiento cuando nos rechazamos a nosotros mismos primero por este sentimiento.

Si nos consideramos a nosotros mismos débiles o frágiles, entonces otorgamos el poder al otro para que pueda pensar tan negativamente sobre nosotros. En el momento en que nos permitimos tener miedo, sin vernos como débiles, perdemos el temor de que otros puedan interpretar nuestro miedo como debilidad y burlarse de él.

Y así perdemos nuestro miedo a mostrar ese sentimiento. Y perdemos el temor de que otros puedan descubrir nuestro verdadero yo, supuestamente malo. Ya no tenemos que agacharnos y fingir. Podemos vivir y experimentarnos a nosotros mismos y eso nos hace libres.

Debemos también tener presente que nadie es siempre genial. Todos tienen sus puntos débiles, sus miedos, y no cualquier puede revelarlos fácilmente. Si encuentras alguien que se burla de ti por ello, puedes optar por estar seguro que su miedo es el que ríe, porque se ha sentido identificado contigo.