El padre de Arnold, Gustav Schwarzenegger, era un policía nazi alcohólico abusivo. Solía golpear a Arnold con cinturones. Como escape a tal situación, Arnold vio películas de acción y desarrolló un amor por Estados Unidos, sintió que su verdadero futuro lo esperaba allí, pero su padre ridiculizó sus sueños.
Su padre quería que él fuera oficial de policía, pero la voluntad de Arnold no se rompería. El culturismo era su única salida. Entonces hizo todo lo que pudo para entrenar para las competencias. Incluso escapó del entrenamiento militar básico para competir y pasó una semana en una prisión militar como castigo.
Arnold Schwarzenegger se fue en busca de su sueño
Con solo un sueño y $20 en el bolsillo, Arnold se fue a Estados Unidos.
Llegó a California cuando tenía 21 años. Trabajaba de albañil de día, de noche se concentraba en su sueño de triunfar en Estados Unidos. Muchos de sus amigos lo ayudaron, dándole platos y almohadas porque estaba muy arruinado. Comenzó vendiendo equipos de gimnasia, luego tomó el dinero sobrante e hizo pequeñas inversiones en bienes raíces.
Arnold tenía la vista puesta en Hollywood, pero tuvo problemas al principio de su carrera como actor.
Recibía constantes rechazos
Le dijeron que su cuerpo era demasiado grande y raro, hicieron también hincapié en que su acento sonaba graciosos, y que, además, su apellido era demasiado largo «Schwarzenegger». Hacía donde el joven intentaba mirar, se le cerraban las oportunidades.
Pero Arnold se mantuvo fiel a sí mismo y a su sueño, y rápidamente se hizo un nombre como actor. Obtuvo un papel pequeño tras otro, incluso ganó un Globo de Oro a la Nueva Estrella del año en 1976.
Con el dinero que ganó con su trabajo secundario, Arnold decidió concentrarse en la actuación a tiempo completo.
La película que lo cambió todo para él
Fue una decisión fatídica, ya que obtuvo un papel importante, a pesar de que fue en una película de bajo presupuesto. Un papel rechazado por Mel Gibson, Tom Selleck, Chevy Chase y casi cedido a Oj Simpson. Pero en 1984, «Terminator» lanzó a Arnold Schwarzenegger al estrellato y se convirtió en un ícono de héroe de acción.
Con una bolsa llena de éxitos de taquilla, Arnold se reinventó una vez más en 2003, cuando dejó el mundo del espectáculo para dedicarse de lleno al servicio público, y finalmente fue elegido gobernador de California.
Arnold está involucrado con las Olimpiadas Especiales y encontró programas que educan a los jóvenes sobre la salud. Como corresponde a este héroe de acción de la vida real, una vez salvó a un hombre que se ahogaba en la costa de Maui.
Sus películas han recaudado miles de millones, pero, lo que es más importante, él es la encarnación del Sueño Americano y un recordatorio de que no importa de dónde vengamos, somos los dueños de nuestro propio destino.
