El estrés en el trabajo afecta negativamente a todas las áreas de nuestra vida. Como todos sabemos, el estrés tiene efectos devastadores en nuestra salud, nuestra psicología y nuestras relaciones.
Según un nuevo estudio, el estrés laboral daña nuestra salud, al igual que el tabaquismo pasivo
Investigadores de la Escuela de Negocios de Harvard en Boston y la Universidad de Stanford publican sus hallazgos en la revista Behavioral Science & Policy Association. Un estudio de la Asociación Americana de Psicología (APA) titulado “Stress in America” encontró que el dinero es la principal causa de estrés en Estados Unidos. En segundo lugar, con una pequeña diferencia porcentual, está el trabajo, con el 60% de los estadounidenses citándolo como la principal causa de estrés.
Según los autores del último estudio, incluido Joel Goe de la Escuela de Negocios de Harvard, se han realizado investigaciones exhaustivas sobre las causas del estrés en el lugar de trabajo.
Para completar el estudio, el equipo de investigación realizó un metanálisis de 228 estudios que examinaron los efectos de varios factores estresantes en el lugar de trabajo; como la inseguridad laboral, las obligaciones familiares y laborales concomitantes, las altas exigencias laborales y las largas jornadas laborales en una relación con los siguientes cuatro efectos sobre la salud: una condición médica diagnosticada, mala salud física, mala salud mental y alta mortalidad.
Los trabajadores con mayor responsabilidad son más propensos a los problemas de salud
Los resultados del análisis revelaron que los trabajadores en puestos con altas exigencias tienen un 50% más de probabilidades de ser diagnosticados con una condición médica que aquellos que no viven con estos factores estresantes.
La inseguridad laboral se asoció con un 50% más de riesgo de mala salud física y mental, mientras que las largas horas de trabajo se asociaron con un 20% más de riesgo de mortalidad.
El equipo también comparó los efectos sobre la salud de los factores estresantes en el lugar de trabajo con los del humo del cigarrillo para los fumadores pasivos, y descubrió que los efectos sobre la salud de estos dos factores eran bastante similares.
Los investigadores agregaron: «Los efectos en la salud del humo de segunda mano son tan significativos que pueden justificar una acción legislativa. Por ejemplo, el tabaquismo pasivo está reconocido como cancerígeno y fumar en lugares públicos, incluidos los lugares de trabajo, ha sido prohibido en muchos estados de los Estados Unidos, así como en muchos otros países».
«Los resultados del metanálisis que realizamos muestran que los factores estresantes en el lugar de trabajo aumentan las posibilidades de efectos adversos para la salud, casi en la misma medida que la exposición al humo de segunda mano». Por lo tanto, Go y sus colegas dicen que, además de centrarse en actividades que promuevan la salud, como aumentar la actividad física y reducir la exposición al tabaquismo en el lugar de trabajo, los legisladores también deberían considerar las prácticas laborales que contribuyen al estrés.
Por ejemplo, posibles reorganizaciones laborales, que pueden incluir la reducción de horas de trabajo, la reducción de turnos y la eliminación de horas extraordinarias no previstas, y el fomento de acuerdos de trabajo flexibles, ayudan a los empleados a lograr un mejor equilibrio entre la vida familiar y laboral.
A menos que las empresas y los gobiernos tomen medidas más estrictas para reducir los efectos nocivos del estrés laboral, los esfuerzos para mejorar la salud y la vida de las personas, reduciendo el costo de la atención médica, tendrán resultados insuficientes.
