El aviador – Una película que nos enseña a luchar por nuestros sueños

El aviador es un film biográfico estadounidense del año 2004, dirigido por Martin Scorsese. Fue nominado a once premios de la Academia, seis Globos de Oro, catorce premios Bafta, tres reconocimientos de la Asociación de Críticos de Los Ángeles e innumerables galardones más. Ganó el Óscar en las opciones de mejor actriz de reparto, fotografía, montaje, diseño de vestuario y dirección de arte. Y recibió tres Globos de Oro en las categorías de mejor película-drama, actor-drama y banda sonora. 

Una película basada en hechos reales

La película se basa en la vida del multifacético y fascinante magnate de la aviación, Howard Hughes (1905-1976). Este fue un famoso empresario, ingeniero de facto y cineasta que, gracias a su inteligencia y buen olfato para los negocios, llegó a convertirse en multimillonario. Hughes, con un carácter fuertemente dominante, generó grandes polémicas por sus extrañas manías; las cuales obedecían a un trastorno de la conducta, conocido en psicología como obsesivo-compulsivo. Sin duda, se trataba de un genio que alcanzó el éxito en todas las áreas de su interés.     

El rol protagónico fue interpretado magistralmente por Leonardo Di Caprio. Cate Blanchett hizo el papel de la famosa actriz de cine Katharine Hepburn y Kate Beckinsale de la no menos conocida Ava Gardner. Hughes fue un mujeriego impenitente pero, estas dos mujeres destacaron en su vida. John C. Reilly representó a Noah Dietrich, su contable y quizás la única persona capaz de enfrentar su temperamento dominante. Alec Baldwin encarnó a Juan Trippe, su némesis además de fundador y presidente de PanAm. 

Un breve resumen de la película El aviador

El aviador, con una duración de 169 minutos, nos transporta con un asombroso realismo a la época de 1920 a 1940. Este fue el período en el que Hughes se hizo a si mismo director y productor de cine; mientras que también diseñó y pilotó sus prototipos de aeroplanos. Su película inicial, Los ángeles del infierno, era sobre la guerra y representaba su ardiente interés por la aviación. En su origen era una cinta muda; no obstante, decidió incluirle sonido después del estreno de la primera obra cinematográfica sonora.

Debido a su obsesión por hacerla perfecta le tomó años e ingentes sumas de dinero poder terminarla, pero, en compensación fue un gran éxito de taquilla. Aun después de su estreno siguió haciéndole mejoras. Si bien la verdadera pasión del polémico hombre eran los aviones y no el cine; esto lo lleva a adquirir a la aerolínea TWA. Hughes mantuvo una larga relación amorosa con K. Hepburn, ella entendía su perturbación y le ayudaba a controlarla; sin embargo, lo deja por sus frecuentes infidelidades.    

En sus fases de diseñador y piloto rompe un record de velocidad y otro de tiempo El aviador, al darle la vuelta al mundo en apenas tres días. Gracias a su contrato con la fuerza aérea construye una aeronave de reconocimiento y el inmenso Spruce Goose (ganso de madera). No obstante, Trippe se convierte en una piedra en su zapato, cuando utiliza sus poderosas influencias para darle a PanAm el monopolio de la aviación internacional. Por las intrigas de Trippe, Hughes termina compareciendo ante un comité de investigación, donde puso en evidencia su gran inteligencia y salió ganador. 

Lecciones que nos deja El aviador

Hughes luchó toda su vida contra su trastorno obsesivo-compulsivo. En muchas ocasiones perdió la batalla, pero sus grandes esfuerzos y éxitos nos dejan tres importantes enseñanzas acerca de los negocios:

• Lo que se hace una vez, se puede repetir y mejorar. Esta máxima aparece repetidas veces en la vida de Hughes. Su padre hizo fortuna en el negocio del petróleo, él siguió su ejemplo y amplió los logros. Su film épico estaba finalizado y lo reinició para incorporarle las últimas tecnologías; la consecuencia fue: una recaudación millonaria. Nunca se conformó con un resultado mediocre, sino que hizo de la búsqueda de la excelencia su meta.
• Es posible destacar en aquello que nos produce una verdadera pasión. Hughes no terminó su carrera de ingeniería; sin embargo, daba lecciones en esta área a quienes si lo habían hecho. Así logro fijar récords mundiales y demostrar que los aeroplanos, eran un medio seguro de transporte. Y no olvidemos que construyó el hidroavión más grande y pesado hasta ese momento.    
• Enfrentar a los grandes y ganarles es factible. Hubo momentos en que Hughes agotó su fortuna y estuvo a punto de irse a la quiebra, pero se arriesgó y triunfo. TWA, en sus manos, creció hasta convertirse en rival de la poderosa PanAm y la segunda aerolínea del país. Y no solo eso, además quitó a su competidor el monopolio que tenía sobre las rutas aéreas internacionales.

En conclusión, El aviador es una película que aparte de proporcionarnos un buen rato de entretenimiento nos deja unas lecciones interesantes. Si en algún momento nos sentimos limitados, podemos recordar que Hughes, un hombre mentalmente enfermo, alcanzó sus sueños y conquistó al mundo. Si bien es cierto que inició su vida siendo rico, jamás trabajó en el negocio de la familia. Y aumentó sus riquezas, construyendo su propio imperio alrededor de lo que más le gustaba hacer: volar.