Compromisos voluntarios: ¿una herramienta eficaz de gestión ética?

El compromiso voluntario de las empresas

¿Los compromisos voluntarios que asumen las empresas con en verdad una promesa honesta o estrategia de marketing? A continuación se reflexiona sobre este compromiso voluntario que asumen las empresas, pero que tiene un principio de obligación fiscal, y al mismo tiempo sus propios beneficios. 

¿Promesa honesta o estrategia de marketing?

Motivados por imágenes de fábricas textiles demolidas y la creciente protesta pública, muchas de las principales tiendas de moda se asustaron y actuaron rápidamente: firmaron compromisos voluntarios, en las que garantizan la protección de los derechos humanos, condiciones de trabajo justas y procesos de producción sostenibles. 

Estos compromisos voluntarios de grandes actores económicos no son nuevos: la industria química ha confiado en este instrumento durante muchos años para proteger el medio ambiente. 

El «Pacto Mundial”, es un acuerdo internacional entre la ONU y más de 9,000 compañías, que se basa en la promesa voluntaria de trabajar juntos para conseguir una mayor sostenibilidad y equidad en muchos ámbitos, sobre todo el empresarial y el laboral.

A los ojos del público, esta promesa de las grandes empresas no es más que una gota en el océano. Y a menudo son acusadas de que el único propósito de tomar tales medidas radica en la mejora de su propia imagen corporativa.

¿Humano o institución?

¿Los compromisos voluntarios en realidad son solo un medio de lavado ecológico, o verdaderamente ayudan a garantizar un comportamiento moralmente responsable? Esto depende sobre todo de quién está haciendo el compromiso en primer lugar.

En las empresas como tal, se habla de los compromisos éticos institucionales, que generalmente se implementan en forma de códigos de conducta. Por ejemplo, el Código de conducta de H&M sobre el trabajo infantil estipula: «La empresa se compromete a tomar las medidas de precaución necesarias para garantizar que no se contrate a ninguna persona menor de la edad mínima legal para trabajar«.

El problema es el siguiente: esta empresa y sus compromisos legales no tienen como objetivo principal hacer que la acción comercial sea más ética. En cambio, solamente tratan de garantizar el cumplimiento de la ley y evitar cualquier endurecimiento de los requisitos legales. También muchas veces no es claro quién se está comprometiendo a mantener el compromiso.

La situación es diferente cuando hablamos de compromisos éticos individuales: una sola persona se compromete a una obligación, de forma similar al juramento hipocrático. Los compromisos éticos individuales son promesas que un líder se hace a sí mismo y a los demás.

 Estas promesas son de mayor transparencia, sostenibilidad, u honestidad. Estos compromisos personales se basan en la motivación intrínseca y los ideales del individuo. No se trata tanto de generar un comportamiento específico a través de reglas y sanciones estrictas, sino más bien de establecer directrices de acción a través de códigos de ética y de dejar abierto un margen de maniobra en el que se desarrolle la acción moral.

 El compromiso personal es particularmente efectivo por dos razones: Primero, alguien con su propio nombre e identidad se compromete a cumplir su promesa, y puede responsabilizarse de las consecuencias en caso de comportamiento dudoso. En segundo lugar, a nivel individual, entran en juego los efectos psicológicos, que pueden explicarse por la teoría del autoconocimiento objetivo (Wicklung y Frey, 1971):

Autoconocimiento objetivo (o autoconciencia)

Cada uno de nosotros hace promesas de vez en cuando, expresando nuestros valores personales. Pero, ¿por qué cumplimos nuestras promesas y porque tienen un impacto en nuestro comportamiento?

La atención de una persona se dirige a los objetos de su entorno o al yo. Cuando el yo está en el centro de atención, un individuo puede percibir y entender sus estados de ánimo, ideales, autoestima y obligaciones.

La atención dirigida hacia uno mismo y hacia sus dimensiones hace que la persona perciba conscientemente las posibles discrepancias entre su comportamiento real y su comportamiento ideal. De esta percepción surge la motivación para la reducción de discrepancias. Los intentos de reducción de discrepancias se expresan en

  • Adaptaciones del comportamiento.
  • Reacciones defensivas (por ejemplo, culpar a alguien más).
  • Evitar los estímulos generadores del autoconocimiento.

El autoconocimiento y el compromiso voluntario

La aplicación de la teoría del autoconocimiento objetivo para el compromiso voluntario de forma individual, muestra ser muy efectiva como se puede observar en el siguiente ejemplo:

  1. Un jefe está comprometido públicamente con la “honestidad y veracidad en el discurso y la palabra escrita a las partes interesadas»
  2. El concepto del compromiso voluntario representa un ideal para él, y es parte de la imagen del jefe como tal.
  3. Como resultado, el jefe enfrenta y decide entre las alternativas de acción.
    a. Información y comunicación al público insuficiente para alcanzar el objetivo de ganancias.
    b. Comunicación honesta y transparente, si es necesario a expensas del objetivo de ganancias.
  4. En el estado de autoconocimiento, los contenidos del compromiso voluntario se perciben como el criterio más alto de evaluación y medida de acción.
  5. Si el jefe considera elegir la alternativa de acción a.), Se da cuenta de la discrepancia entre el yo ideal (honestidad y veracidad) y la acción real (deseada).
  6. El autoconocimiento aumenta la coincidencia y coherencia entre actitud y comportamiento. Es probable que esta percepción de discrepancia sea seguida por un ajuste del comportamiento con el fin de cumplir con el compromiso personal.

El yo en el corazón de la ética empresarial

En el contexto corporativo, se pueden tomar varias medidas para aumentar el autoconocimiento de los empleados y aumentar la probabilidad de que ocurra un ajuste de su comportamiento. Para que haya un aumento de su autoconocimiento es muy importante la retroalimentación de los superiores.

Estos son dos aspectos importantes para una efectiva retroalimentación:

  • Tiempo suficiente;
  • La ausencia de estímulos distractores.

Es importante asegurarse de que la retroalimentación no sea negativa, para evitar que en lugar de una adaptación conductual óptima, se cause una reacción defensiva. 

Una retroalimentación exitosa debería…

Fortalecer la autoestima o protegerla

Se debe enfocar principalmente en los aspectos positivos de la persona, y siempre tener en cuenta sus logros del pasado

Ofrecer orientación para obtener buenos resultados

Enfocarse en objetivos a mediano plazo, así como ofrecer apoyo constante.

Transmitir la motivación por el cambio positivo

Fortalecer la autoconciencia para promover la voluntad de cambiar el comportamiento de manera positiva.

Ofrecer opciones con respecto a los temas de reflexión

Teniendo en cuenta que en el estado de autoconcienca, la retroalimentación se puede percibir fácilmente como una amenaza personal si se está demasiado cerca del ego.

Los compromisos promueven la competencia ética

Sin embargo, los compromisos éticos individuales no solo tienen un efecto concreto que influye en nuestras acciones, sino que también tienen un efecto positivo en el discernimiento moral y el desarrollo de la competencia ética.

Entre las competencias éticas se encuentran:

  1. Competencia de la reflexión;
  2.  Imaginación moral;
  3. Coraje moral.

La competencia de la reflexión se refiere a la capacidad de realizar juicios morales de manera crítica e integrar el problema moral concreto en un contexto general. Los compromisos éticos individuales generalmente contienen solo principios formulados de manera no específica, que deben interpretarse de una manera específica dada una situación. 

En el estado de autoconciencia, un cambio de perspectiva puede ser más fácil y se reconocen las discrepancias entre la autopercepción y la percepción externa. Esta visión crítica de la propia perspectiva también se puede promover en la retroalimentación orientada a la autoconciencia. Se debe analizar el papel de los propios valores y consolidar el significado del compromiso personal en el discurso.

La imaginación moral, como segundo aspecto de la competencia ética, significa una exploración sabia y constructiva de las discreciones morales. Dado que los compromisos éticos individuales generalmente no contienen reglas de comportamiento explícitas, brindan la libertad necesaria, que se puede completar considerando cómo se puede resolver un problema moral concreto de una manera prometedora.

El coraje moral no implica someterse a toda costa ante las reglas convencionales. Por el contrario, se trata de tomar una distancia crítica y examinar el contenido ético de la moral que prevalece. Un compromiso personal ético no puede seguirse con una lealtad ciega, ya que cada caso individual requiere una consideración individual de los propios valores y puntos de vista. 

Además, si bien existe la posibilidad de que una conducta que contradiga los principios de la empresa pueda ser sancionada por la misma, un compromiso ético individual es también una promesa para uno mismo y no solo para la empresa. En consecuencia, el cumplimiento del compromiso también está controlado por la conciencia del individuo.

Conclusión

Si se va a promover el coraje moral dentro de una empresa, es importante que se fortalezca una conciencia moral crítica, pero que no se impongan sanciones negativas. Un compromiso ético individual puede ayudar a promover la conciencia moral y fortalecer las competencias éticas.