Existen diferencias genéticamente determinadas en las necesidades de sueño de cada una de las persona. Las diferencias afectan el tiempo y la duración del sueño necesario, como así el horario en que despiertan y se vuelven más activas.
Desde un punto de vista evolutivo, eso tiene sentido, porque nuestros antepasados de la Edad de Piedra dormían a cielo abierto. Si todo el grupo hubiera dormido profunda y firmemente al mismo tiempo, entonces un atacante habría tenido un tiempo fácil para acecharlos.
La evolución tenía buenas razones para asegurarse de que nuestros antepasados pudieran dormir hasta tarde. Algunos despertaban un poco antes y otros un poco más tarde. Entonces alguien siempre estaba despierto para hacer sonar la alarma en caso de emergencia.
Hay durmientes cortos y durmientes largos
Cuando se dice que los adultos necesitan ocho horas de sueño, no es la necesidad de dormir de cada individuo, sino la media.
Si bien la necesidad de dormir de la mayoría de las personas está cerca de esta media, pueden producirse desviaciones claras: cuanto más grande, menor es la desviación. Pero definitivamente hay personas que necesitan solo cuatro horas de sueño, y hay personas que necesitan tener doce horas, por ejemplo.
Las personas que naturalmente duermen temprano y se despiertan temprano se llaman «alerces». En el otro extremo del espectro están los «búhos», que duermen tarde y se despiertan tarde (a menos que se despierten prematuramente).
Levantarse temprano y dormir lo suficiente parece una tarea imposible para este tipo de personas. Siempre hay algo que preferirías hacer en la noche que ir a la cama. Sin embargo, hay varios consejos para levantarse temprano y convertirse en un ave temprana que pueden requerir que realices algunos cambios en tu rutina de sueño, y como todo, es cuestión de aprender a dormir otra vez de manera que nos resulte productivo el día.
Pasos para levantarse temprano sin tormentos
Levantarse temprano y sentirse rejuvenecido al instante es todo un desafío para la mayoría. Con estos sencillos pasos conseguirás levantarte con más energía y aumentando el rendimiento diario.
1. Duerme lo suficiente
La verdadera pregunta es cómo levantarse temprano y sentirse bien. Desafortunadamente, es imposible sentirse bien si no duermes lo suficiente. Según la investigación, un adulto promedio necesita de siete a nueve horas de sueño.
Mientras dormimos, pasamos por cinco etapas de un ciclo de sueño. La primera etapa es el sueño ligero, seguido de una etapa que nos prepara para el sueño profundo. Luego viene la etapa de sueño profundo, y continúa hasta la cuarta etapa. Después de estas cuatro etapas viene la etapa REM.
Los ciclos de sueño duran aproximadamente 90 minutos y se recomienda obtener cinco ciclos de sueño cada noche (7,5 horas en promedio). Si tienes que irte a la cama muy tarde, se recomienda que asegures al menos tres ciclos de sueño o 4.5 horas.
Levantarse temprano sin cumplir con los ciclos de sueño trae como consecuencia ese estado de somnolencia y falta de energía con la que suelen levantarse la mayoría de personas que deben madrugar.
2. Trata de despertarte temprano los fines de semana también
Uno de los grandes consejos para levantarse temprano con más energía es hacerlo en los fines de semana también. Usamos nuestros fines de semana como nuestro tiempo libre, por lo que puede parecer inútil levantarse temprano. Pero, al dormir, interrumpirás tu rutina constante de aprendizaje para levantarte sin sentirte cansado.
Usa el tiempo adicional que obtienes al levantarte temprano durante los fines de semana para hacer algo divertido. Por ejemplo puedes inscribirte en alguna clase matutina, salir a caminar, pasear por las montañas, tomar un café con un amigo o, si quieres mejorar tu salud, salir a correr puede ser una buena idea.
Asegúrete de que realmente planeas tus actividades de ocio. Si no lo haces, entonces probablemente no tendrás razón suficiente para despertarte temprano.
3. Una ducha caliente
Esta es probablemente la mejor manera de conseguir que nuestro cuerpo se prepare para el descanso, el sueño aparece como por arte de magia simplemente realizando una acción que es muy reconfortante para nuestro cuerpo y mente, darnos una ducha caliente y tomar varias respiraciones profundas al salir del baño.
Para que esto tenga un impacto positivo y nos permita dormir a una hora adecuada para poder levantarnos temprano al otro día y renovados, es necesario bañarnos media hora antes de acostarnos, en el transcurso de esos 30 minutos nuestro cuerpo entra en un proceso de relajación y el sueño aparece repentinamente, lo ideal es que nos encuentre en la cama, leyendo un libro y relajados. Al otro día podrás levantarte renovado y sin deuda de sueño.
Si llevas esta práctica a tu rutina, lo convertirás en un buen hábito que te ayudará a levantarte temprano sin conflictos y listo para sentirte activo.
