¿Cómo eliminar las creencias limitantes para abrazar el futuro?

Las creencias limitantes que nos impiden avanzar

Si quieres progresar, debes comenzar con erradicar de tu mente las creencias limitantes y condicionantes.

¿Qué son las creencias limitantes?

Las creencias limitantes son aquellas que se enraízan en la mente de una persona, como producto de enseñanzas o de experiencias vividas que hacen percibir la realidad de una forma errónea; limitando así nuestro crecimiento personal.

Esta creencia forma parte del conjunto de creencias fundamentales en toda persona, que se fomentan durante la etapa de aprendizaje en los primeros años de la vida.

Es por esto que las personas que tutelan a un niño durante ese período, tienen una influencia fundamental en lo que será la manera de pensar del niño cuando llegue a la adultez.

Esto, a grosso modo, implica que tanto el entorno familiar, el socio-cultural y la educación que una persona recibió durante la infancia; han condicionado de manera inequívoca la forma de pensar que tiene hoy.

De allí la importancia de estar atentos a los mensajes y enseñanzas que le profesamos a nuestros hijos, durante sus primeros años de vida.

Las creencias limitantes y la autoestima

Las creencias limitantes, que a modo general son aprendidas durante la edad escolar, pueden originar con el tiempo serios trastornos relacionados con la falta de confianza y la baja autoestima.

Solo se necesita que una persona adulta le diga de manera reiterada a un niño: “No puedes” o “tú no vales para nada”, para que éste se condicione y termine por creérselo.

En los trastornos de autoestima y auto confianza, la creencia limitante viene comúnmente  asociada a un miedo: Temor a hablarle a un en público, temor al rechazo, temor al fracaso, etc.

Lo que siempre se debe tener claro, es que este tipo de creencia en el fondo no responde a una verdad o a un hecho perfectamente demostrable cuando se le racionaliza; sino más bien a líneas de pensamientos que se asocian a ideas que se dan por sentado y no se cuestionan.

Estrategias para erradicar las creencias limitantes de la mente.

Para empezar, se debe cuestionar todo lo que hasta ahora se consideraba como un hecho irrefutable, y abrir la mente a la captación de nuevas ideas y manera de hacer las cosas.

Para lograrlo, hay estrategias que se pueden poner en marcha:

1. Evalúa cómo reacciona tu cerebro a los retos

Para ello es necesario evaluar la forma en la que nos expresamos y tratar de evidenciar frases que se inicien con las palabras “Creo que”,  “esta no es buena época para”, “Me temo que” o generalizaciones del tipo “nada me sale bien” o “me estoy esforzando todo lo que puedo”

Todas las frases anteriores ponen en evidencia una forma condicionada de pensar, por lo que ahora hay que preguntarse el por qué se tiene y se aceptan esas creencias.

Este es el primer paso para su erradicación.

2. Haz un cambio mental de las creencias

 Para lograr el cambio de una creencia limitante por una creencia potenciadora, hay que efectuarle una evaluación muy objetiva; la cual debe atender a las siguientes interrogantes:

  • ¿Esta creencia es aprendida de otra persona o corresponde a una vivencia?
  • ¿El fondo de la intención es positivo? (es decir, si se pretendía transmitir una sana enseñanza).
  • ¿Qué creencia quieres incorporar a tu mente?
  • ¿El cambio agrega valor a mi vida para que valga la pena?
  • ¿Puede el cambio de creencia empeorar mi vida?
  • ¿A dónde te puede llevar mantener la vieja creencia?
  • ¿Qué aspiras que suceda gracias a la nueva creencia positiva?

Al sustituir creencias, automáticamente irás predisponiendo al cerebro a percibir el mundo con otras perspectivas; dándole un nuevo enfoque a la manera de emprender las cosas.

3. Consolida la nueva creencia

Hay dos maneras de comprobada efectividad, para afianzar en nuestras mentes las nuevas creencias incorporadas a nuestra línea de pensamiento:

  • Repetición de afirmaciones: Debes tomarte tiempo para repetirte una y otra vez a ti mismo todo lo relativo a la nueva creencia. Es una excelente manera de lograr reprogramar la forma de pensar que tiene el cerebro.
  • Entrenamiento a través del comportamiento: Para ello deben llevarse a la práctica las conductas, lenguaje y línea de pensamiento que estén asociados a la nueva creencia.

Por supuesto que no va a ser tarea sencilla desarraigar de nuestras mentes las viejas creencias, pero con paciencia, tiempo y esfuerzo conseguirás afianzar las nuevas.