¿Tu pequeño tiene afición por el arte y estás pensando en escribirlo en cursos o seminarios afines? ¡No lo dudes! ¡Los beneficios de que los niños participen en las artes son muchos!
El arte enseña a los niños valores y otras perspectivas
Las artes enseñan a los niños a juzgar correctamente las relaciones de calidad. La capacidad crítica es importante en las artes, como es el caso de muchos cursos curriculares, las respuestas y reglas correctas.
Las artes enseñan a los niños que un problema puede tener más de una solución y que puede haber más de una respuesta para cada pregunta.
Las artes glorifican múltiples perspectivas
Una de sus grandes lecciones es que hay muchas formas en las que podemos ver e interpretar el mundo. Tener diversas perspectivas posibles ante una situación vuelve más rico el mundo interior del niño.
Las artes enseñan a los niños que, en formas complejas de problemas, los objetivos de resolución no son fijos, sino que cambian según la ocasión y la oportunidad. El aprendizaje a través de las artes requiere la capacidad y la voluntad de rendirse a las posibilidades inesperadas de una obra a medida que evoluciona.
Las artes enfatizan fuertemente el hecho de que ni las palabras ni los números pueden expresar lo que podemos saber. Los límites de nuestra capacidad lingüística no determinan los límites de nuestro conocimiento.
Las artes enseñan a los estudiantes que las pequeñas diferencias pueden tener grandes consecuencias. Las artes se mueven sutilmente entre tonos discretos.
Las artes enseñan a los estudiantes a pensar usando materiales. Todas las formas de arte utilizan algún medio por el cual las imágenes se vuelven realidad.
Las artes ayudan a los niños a aprender a decir cosas que no se pueden decir
Cuando se les pide a los niños que revelen qué emociones crea en ellos una obra de arte, entonces deben recurrir a sus habilidades poéticas para encontrar las palabras adecuadas.
Las manifestaciones que podemos lograr mediante el arte, la pintura, la música y la danza, son expresiones más directas que las meramente intelectuales, lo que brinda al niño un puente para expresar muchos sentimientos hondos.
