Según estudios, los optimistas viven más años

¿Te consideras una persona optimista o pesimista? ¿Crees que tu actitud ante la vida influye en tu salud y longevidad? Según varios estudios científicos, la respuesta es sí.

Los optimistas tienden a vivir más años que los pesimistas, y además lo hacen con mejor calidad de vida. En este artículo te explicamos por qué y cómo puedes cultivar el optimismo en tu día a día.

¿Qué es el optimismo?

El optimismo es una actitud mental que consiste en esperar que las cosas salgan bien y enfocarse en los aspectos positivos de la realidad.

No se trata de negar los problemas o las dificultades, sino de afrontarlos con confianza y esperanza. El optimismo implica creer que se puede mejorar la situación actual y que se tiene el control sobre el propio destino.

El optimismo se puede medir mediante diferentes escalas, como la Escala de Orientación a la Vida (LOT-R), que evalúa el grado de acuerdo con afirmaciones como «En general, espero que me ocurran más cosas buenas que malas» o «Si algo puede salir mal, saldrá mal» (esta última refleja el pesimismo).

¿Cómo influye el optimismo en la salud y la longevidad?

Numerosos estudios han demostrado que el optimismo tiene efectos beneficiosos para la salud física y mental. Por ejemplo, los optimistas:

  • Tienen menos riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, hipertensión, diabetes, infecciones y cáncer.
  • Tienen un sistema inmunológico más fuerte y una mejor respuesta al estrés.
  • Se recuperan más rápido de las cirugías y las lesiones.
  • Tienen menos depresión, ansiedad y estrés.
  • Tienen más autoestima, satisfacción y bienestar.
  • Tienen mejores relaciones sociales y mayor apoyo social.

Todos estos factores contribuyen a que los optimistas vivan más años que los pesimistas. Un estudio publicado en 2019 en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences analizó los datos de más de 70.000 personas y encontró que los optimistas tenían un 11% más de probabilidades de vivir hasta los 85 años o más, y un 15% más de probabilidades de tener una vida excepcionalmente larga (más de 90 años).

Otro estudio publicado en 2020 en la revista American Journal of Epidemiology siguió a más de 69.000 mujeres y 1.400 hombres durante varias décadas y halló que los optimistas tenían un 14% menos de riesgo de morir por cualquier causa durante el periodo de seguimiento, y un 50% menos de riesgo de morir por enfermedades infecciosas.

¿Cómo se puede ser más optimista?

El optimismo no es algo fijo e inmutable, sino que se puede aprender y desarrollar. Algunas estrategias para ser más optimista son:

  • Practicar la gratitud: agradecer cada día las cosas buenas que te han pasado o que tienes en tu vida, por pequeñas que sean.
  • Buscar el lado positivo: intentar ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío, y sacar una lección o una oportunidad de cada situación difícil.
  • Desafiar los pensamientos negativos: cuestionar las creencias irracionales o exageradas que te hacen sentir mal o te limitan, y sustituirlas por otras más realistas y constructivas.
  • Establecer metas: tener objetivos claros y alcanzables que te motiven y te den sentido a tu vida, y celebrar tus logros.
  • Cuidar tu salud: llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio físico regularmente, dormir bien y evitar el consumo de alcohol, tabaco u otras drogas.
  • Rodearte de gente positiva: buscar el apoyo y la compañía de personas que te quieran, te valoren y te animen a crecer.

Ser optimista no significa ignorar la realidad o vivir en una burbuja. Significa tener una actitud proactiva y resiliente ante los desafíos de la vida, confiando en tus capacidades y en las posibilidades de cambio.

Ser optimista te ayudará a vivir más y mejor, y a contagiar tu alegría a los demás.