En este artículo, haremos una reflexión corta sobre el tema de la compatibilidad entre los tipos de personalidad, pero para ello primero debemos definir. ¿Qué son los tipos de personalidad?
Los tipos de personalidad
Son categorías que describen las preferencias y tendencias de las personas en cuanto a su forma de pensar, sentir y actuar.
Existen varios modelos y teorías que clasifican a las personas en diferentes tipos de personalidad, como el modelo de los cuatro temperamentos, el eneagrama, el sistema Myers-Briggs y otros.
Uno de los aspectos más interesantes y útiles de conocer los tipos de personalidad es que nos pueden ayudar a entender mejor a los demás y a nosotros mismos, así como a mejorar nuestras relaciones interpersonales.
Al saber cómo somos y cómo son los demás, podemos adaptarnos mejor a sus necesidades, expectativas y estilos de comunicación, y evitar conflictos innecesarios. Además, podemos descubrir qué tipo de personas son más compatibles con nosotros y con las que podemos establecer vínculos más profundos y satisfactorios.
Qué significa la compatibilidad
Pero ¿qué significa ser compatible? ¿Es lo mismo que ser igual? ¿O es lo contrario? La respuesta es que no hay una única forma de definir la compatibilidad, sino que depende de varios factores, como los valores, las metas, los intereses y las circunstancias de cada persona.
Sin embargo, desde el punto de vista de los tipos de personalidad, podemos decir que la compatibilidad se basa en el equilibrio entre la similitud y la diferencia.
Es decir, se trata de encontrar a alguien que comparta algunas características con nosotros, pero que también tenga otras que nos complementen y nos enriquezcan.
¿Cuáles son los tipos de personalidad más compatibles?
Entonces, ¿cuáles son los tipos de personalidad más compatibles? No hay una respuesta definitiva a esta pregunta, ya que cada persona es única e irrepetible, y puede tener afinidad con personas de diferentes tipos.
Sin embargo, algunos estudios y expertos han sugerido algunas combinaciones que suelen funcionar bien en términos generales. Por ejemplo:
- Los tipos intuitivos (N) suelen llevarse bien con otros tipos intuitivos, ya que comparten una visión abstracta y creativa del mundo, y les gusta explorar nuevas ideas y posibilidades.
- Los tipos sensoriales (S) suelen llevarse bien con otros tipos sensoriales, ya que comparten una visión práctica y realista del mundo, y les gusta enfocarse en los hechos y los detalles.
- Los tipos pensadores (T) suelen llevarse bien con otros tipos pensadores, ya que comparten una forma lógica y objetiva de tomar decisiones, y les gusta analizar las cosas con criterio y racionalidad.
- Los tipos sentidores (F) suelen llevarse bien con otros tipos sentidores, ya que comparten una forma empática y subjetiva de tomar decisiones, y les gusta considerar los sentimientos y valores propios y ajenos.
- Los tipos extrovertidos (E) suelen llevarse bien con otros tipos extrovertidos o con tipos introvertidos (I) que les den espacio para expresarse y socializar.
- Los tipos introvertidos suelen llevarse bien con otros tipos introvertidos o con tipos extrovertidos que les den tiempo para reflexionar y recargarse.
Estas son solo algunas pautas generales que pueden variar según el caso. Lo importante es recordar que no hay tipos de personalidad mejores o peores que otros, sino diferentes.
Y que la compatibilidad no es algo fijo o determinado, sino algo que se construye con el tiempo, el esfuerzo y la comunicación.
Así que no te limites a buscar a tu tipo ideal, sino a conocer a las personas por lo que son y por lo que te pueden aportar.
