El final de una relación amorosa puede constituir una herida profunda para nuestra autoestima. Podemos preguntarnos «¿por qué me pasó esto a mí? » O «¿cómo es posible que me haya dejado?» o puedes dudar de si en verdad serás amado por alguien: «si me ha dejado, significa que no soy capaz de estar en una relación».
La reacción más frecuente cuando termina una relación que ha durado mucho tiempo es la incredulidad: parece imposible que la persona que amamos y con quien compartimos tantos momentos y nuestros mejores (y peores) lados ya no quieran tenernos en su vida.
El dolor relacionado con el final de un amor puede ser muy intenso e incluso puede tomar mucho tiempo para sanar. En algunos casos el final de un amor también se experimenta como algo inaceptable e imposible, porque hemos establecido una verdadera relación de dependencia con la otra persona, como una muleta para ayudar a mantenernos en un estado de ánimo estable. Pero ¿cómo podemos procesar esta pérdida que representa un verdadero duelo en nuestra vida?
No es necesario decir que no podremos eliminar por completo el dolor de terminar una relación, pero al menos podemos adoptar algunas precauciones que pueden ayudarnos y apoyarnos en el camino hacia el procesamiento de la pérdida y la recuperación de nuestra vida.
¿Cómo superar la relación una vez que se termina?
Aquí hay algunos consejos que pueden ser de mucha ayuda cuando termina una relación de pareja:
1. Expresa tus emociones
Expresar emociones nos ayuda a modularlas y hacerlas más tolerables. Puedes expresarlas con un amigo o contigo mismo escribiéndolas en un diario. También puedes decidir escribir una carta imaginaria que enviarías a tu expareja en la que escribas las emociones que sientes con respecto al final de su historia (por ejemplo, ira, tristeza, etc.).
2 No reprimas el sufrimiento
Para superar un trauma como el relacionado con la pérdida de una relación importante es necesario recibir y aguantar las aguas del sufrimiento. Si evitas por completo el sufrimiento, difícilmente podrás superarlo, y te atascarás en algún lugar de tu mente y cuerpo.
3. Evita las quejas
A veces confundimos la expresión de nuestras emociones con la expresión de quejas sin propósito. Cuando expresamos una emoción que sentimos en el momento, es algo espontáneo que en realidad nos hace sentir más ligeros y en donde las personas a nuestro lado se vuelvan atentas y comprensivas con nosotros.
Sin embargo, cuando nos quejamos, seguimos convenciéndonos de que las cosas nunca resultarán para nosotros, no escuchamos nuestras emociones, somos molestos y pesados para nosotros mismos y para los demás. ¡La queja, al contrario de la expresión saludable de las emociones, aleja a los demás!
4. Cuida tu bienestar psicológico
Sabemos que el sufrimiento es normal después del final de un amor, pero a veces sucede que nuestra mente entra en el ciclo de pensar y repasar el pasado, de compararlo con el presente o volver al pasado como si quisieras cambiarlo y hasta proyectar una imagen del futuro de lo que pudo haber sido y no será.
Un primer paso para cambiar esto es tomar conciencia de estos viajes de la mente, un segundo paso es decidir dónde enfocar nuestra atención, es decir, si continuar viajando o si salir de la máquina del tiempo. Practicar la meditación podría ayudarte a ser más consciente de lo que está sucediendo dentro de ti y a elegir cómo quieres que tu mente funcione.
5. Cuida tu cuerpo
La actividad física, especialmente el aire libre es el mejor antidepresivo. Esto puede ayudarte a no tener un bajón en tu estado de ánimo y a hacerte sentir más seguro y físicamente atractivo.
6. Evita buscar el apoyo de la persona que te dejó
Esto es algo trivial, pero a menudo sucede que le pedimos apoyo emocional a la persona que nos dejó. Solamente dejando de lado el contacto con ella e interrumpiendo toda investigación de su vida, podrás dejar de lado la relación pasada y ser capaz de superar el dolor asociado con la pérdida.
7. Establece nuevas metas
Terminar una relación puede cambiar significativamente nuestros hábitos e interrumpir nuestros planes. Puede que sea hora de repensar cómo redirigirás tu vida. Esta es una gran oportunidad para encontrar en tu vida nuevos hábitos y pasatiempos que quizás desconocías.
8. Acércate a las personas que te aman
En estos momentos pasar tiempo con amigos puede ayudarte a sentirte menos solo, expresar tus emociones o simplemente distraerte compartiendo tu tiempo libre.
9. Elige cuidadosamente tus libros, música, y películas
¿Por qué alimentar al sufrimiento con lecturas, música y películas depresivas? Sabemos que nuestra mente nos empuja a buscar contenido relacionado con nuestro estado de ánimo, que a veces termina empeorando.
10. Si tiendes a idealizar la relación, haz un esfuerzo por también recordar sus defectos
Cuando extrañamos a una persona, a menudo tendemos a idealizar hermosos recuerdos con esa persona y sus fortalezas. Recordar los defectos de la relación te ayudará a tener una visión más equilibrada. Ciertamente tenía al menos uno: no eligió quedarse contigo.
Busca la ayuda de un especialista para superar una relación amorosa
Si durante varios meses o años has estado atascado procesando un rompimiento, probablemente necesites ayuda profesional. Algo en el proceso de la superación no ha ido en la dirección correcta y no te estás permitiendo «soltar» a la persona de tu mente.
La ayuda terapéutica puede ser adecuada para encontrar el camino correcto para superar el final de una relación amorosa y, al mismo tiempo, comenzar a tener una mejor relación contigo mismo.
Un estudio publicado en Social Psychological & Personality Science [¹] descubrió que la terapia psicológica puede ser útil para que sea más fácil seguir adelante tras una ruptura amorosa.
La terapia, desafortunadamente, tiene un cierto estigma a su alrededor. Muchas personas están demasiado avergonzadas u orgullosas para buscar la ayuda que necesitan porque creen que el final de una relación de pareja no es una razón lo suficientemente valiosa para hacerlo.
Sin embargo, una ruptura, en muchos casos, puede ser una pérdida devastadora, por lo que no hay nada dramático en buscar ayuda profesional. Una persona ajena a tu círculo íntimo (el profesional psicólogo en este caso) que comprende la psicología detrás de las rupturas pero que también tiene una perspectiva totalmente objetiva sobre ti y tu vida, puede marcar una gran diferencia en tu capacidad para superar la pérdida y seguir adelante.
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- Larson, G. M., & Sbarra, D. A. (2015). Participating in Research on Romantic Breakups Promotes Emotional Recovery via Changes in Self-Concept Clarity. Social Psychological and Personality Science, 6(4), 399–406. https://doi.org/10.1177/1948550614563085
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