Síntomas del desorden del espectro del autismo

Un niño que padece autismo

Las personas que presentan trastorno del espectro autista muestran comportamientos limitados o repetitivos y deficiencias en la comunicación social que surgen durante el período de desarrollo temprano.

Las manifestaciones del trastorno varían según la gravedad de los síntomas autistas, así como por el nivel de desarrollo del niño y la edad cronológica, justificando el término «espectro» en el nuevo nombre del trastorno.

Déficits de comunicación

Niños con autismo presentan un déficit de atención y desorden en comunicación verbal y no verbal. El fracaso o la dificultad para relacionarse emocionalmente con los demás es un síntoma característico del autismo.

En general, los niños tienen dificultades para mirar a los ojos, entender las sutilezas de la conversación (por ejemplo, el lenguaje corporal), identificarse con las emociones de los demás y expresar sus propios pensamientos y sentimientos.

La gravedad de estos déficits puede variar desde problemas para comprender el gesticular en la conversación hasta la falta de intentos de iniciar o responder por completo a la interacción social.

También es común que los niños con autismo a menudo tengan dificultades para adecuar el comportamiento y las expresiones faciales para cumplir con circunstancias sociales específicas.

Los déficits verbales implican problemas con el lenguaje hablado y la conversación apropiada con los demás. Los déficits varían en severidad, desde la completa falta de expresión hasta el discurso excesivamente literal. Para cumplir con los criterios de diagnóstico, los problemas de comunicación deben ser persistentes y generalizados en todos los contextos.

Comportamientos anormales

Las conductas restringidas y / o repetitivas constituyen otros de los síntomas del autismo. Una persona debe mostrar dos de los siguientes: comportamientos estereotipados, rutinas demasiado rígidas, intereses o preocupaciones muy específicas e hipersensibilidad a los estímulos sensoriales en el entorno.

Los movimientos estereotipados o los comportamientos con objetos pueden incluir aleteo de manos, sacudidas de dedos, giro de monedas, alinear objetos y otras acciones repetidas. Las frases o palabras estereotipadas también son comunes, como repetir el habla de los demás.

La rigidez implica una adherencia insistente a rutinas, métodos o reglas diarias específicas, así como resistencia al cambio. Por ejemplo, un niño puede insistir en cierta manera para abrir un paquete de alimentos, y puede estar muy molesto si se ve interrumpido o si el envase del artículo mismo ha cambiado.

El cumplimiento excesivo a menudo va acompañado de una fijación limitada para ciertos intereses u objetos. Por ejemplo, un niño puede preferir jugar únicamente con una sartén casera o un solo juguete sobre todos los demás objetos. El enfoque estrecho en ciertas actividades y la ingesta restrictiva de alimentos también son comunes.

Sensibilidad excesiva o insuficiente a los estímulos

La sensibilidad excesiva o insuficiente a los estímulos en el entorno constituye el último síntoma conductual en el autismo. Un niño con hipersensibilidad puede mostrar una reacción extrema que no guarda proporción con la sensación.

Por ejemplo, un niño puede llorar y taparse los oídos cuando está en una habitación donde se producen múltiples conversaciones. Un niño con hiposensibilidad puede ser menos reacio al dolor físico que otros.

En otros casos, los niños pueden mostrar una preferencia fuerte o mostrar fascinación con ciertas texturas, olores, sabores, imágenes o sonidos. Por ejemplo, mientras un niño huele o toca excesivamente un objeto, otro puede obsesionarse con cosas que giran de forma colorida.

Un médico evaluará la gravedad actual de un niño con autismo en función de la cantidad de ayudante diaria requerida por el individuo. Por ejemplo, lo menos severo se notaría como «requerir apoyo», mientras que lo más severo se notaría como «requerir un apoyo sustancial».

El médico que establece el diagnóstico también notará si el trastorno está acompañado de deterioro intelectual y / o del lenguaje o con catatonia.