La despersonalización es un trastorno psicológico que se caracteriza por una pérdida de la sensación de identidad y de conexión con la realidad.
Las personas que sufren de despersonalización se sienten como si fueran espectadores de su propia vida, sin poder controlar sus pensamientos, emociones o acciones.
La despersonalización puede afectar negativamente a la autoestima, las relaciones sociales y el rendimiento laboral o académico.
¿Qué causa la despersonalización?
La despersonalización puede tener diferentes causas, como el estrés, el trauma, el abuso, las drogas, las enfermedades mentales o físicas, o una combinación de estos factores.
No se sabe exactamente cómo se produce la despersonalización, pero se cree que es una forma de defensa psicológica ante situaciones que resultan abrumadoras o amenazantes para el individuo.
¿Cómo se diagnostica la despersonalización?
La despersonalización se diagnostica mediante una entrevista clínica con un profesional de la salud mental, que evalúa los síntomas y el impacto que tienen en la vida de la persona.
Para que se considere un trastorno, la despersonalización debe ser persistente o recurrente, y causar un malestar significativo o una dificultad para funcionar en el día a día. La despersonalización también puede ser un síntoma de otros trastornos mentales, como la depresión, la ansiedad, el trastorno límite de la personalidad o el trastorno por estrés postraumático.
¿Qué signos indican que se sufre de despersonalización?
La despersonalización puede manifestarse de diferentes formas, pero hay algunos signos comunes que pueden alertar de que se trata de un problema serio que requiere atención profesional. Estos son los 5 signos de despersonalización que no deben ignorarse:
1. Sentirse desconectado de uno mismo
Uno de los signos más característicos de la despersonalización es sentirse desconectado de uno mismo, como si se observara desde fuera o desde una distancia.
La persona puede tener la sensación de que su cuerpo no le pertenece, o que sus movimientos son automáticos o extraños. También puede sentir que su voz, su imagen o su nombre son irreales o ajenos.
2. Sentirse desconectado del mundo
Otro signo de la despersonalización es sentirse desconectado del mundo, como si se viviera en una burbuja o en un sueño. La persona puede percibir el entorno como distorsionado, borroso, plano o sin color. También puede tener dificultades para reconocer a las personas, los lugares o los objetos familiares, o para sentir emociones hacia ellos.
3. Tener problemas de memoria
La despersonalización también puede afectar a la memoria, provocando lagunas, confusiones o falsos recuerdos.
La persona puede tener problemas para recordar lo que ha hecho, lo que ha dicho o lo que ha sentido en un momento determinado. También puede tener dificultades para concentrarse, para seguir una conversación o para aprender cosas nuevas.
4. Tener pensamientos obsesivos
La despersonalización puede generar pensamientos obsesivos sobre la propia existencia, la realidad o el sentido de la vida. La persona puede cuestionarse constantemente quién es, qué hace o por qué está aquí. También puede tener miedo de perder el control, de volverse loco o de morir.
5. Tener síntomas físicos
La despersonalización también puede causar síntomas físicos, como mareos, náuseas, palpitaciones, sudoración, temblores o entumecimiento. Estos síntomas pueden ser el resultado del estrés, la ansiedad o la falta de atención que implica la despersonalización.
¿Qué se puede hacer ante la despersonalización?
La despersonalización es un trastorno que tiene tratamiento y que se puede superar con ayuda profesional. El tratamiento más efectivo es la psicoterapia, que ayuda a la persona a entender y afrontar las causas y las consecuencias de la despersonalización.
La psicoterapia también enseña técnicas para manejar el estrés, mejorar la autoestima, fortalecer las relaciones y recuperar el sentido de la realidad. En algunos casos, se puede recurrir a la medicación para aliviar los síntomas asociados a la despersonalización, como la depresión o la ansiedad.
Si crees que sufres de despersonalización, no dudes en buscar ayuda profesional. La despersonalización es un problema que puede afectar gravemente a tu calidad de vida, pero que tiene solución. Recuerda que no estás solo, y que hay personas que pueden ayudarte a recuperar tu identidad y tu conexión con el mundo.
