Los amigos falsos son como el lado oscuro de la luna. Al principio nos ciegan con sus encantos y amables atenciones, pero poco a poco vemos el otro lado, cuyas profundidades esconden un personaje interesante. Un lado emocional, estéril y desolado que, casi sin que nos demos cuenta, nos pueden afectar profundamente. Tales personalidades, sin duda, deben ser identificadas lo antes posible, por el bien de nuestra propia salud mental.
Suele decirse que la amistad es el mejor ingrediente de la vida. Sin duda, también lo es el amor, pero lo que un buen amigo hace por nosotros a veces trasciende los lazos románticos y los lazos familiares. Así, este tejido de amistad, basado en la participación, las experiencias compartidas y la fuerte confianza, nos da energía eterna y, sobre todo, calidad de vida.
Sin embargo, es inevitable que de vez en cuando nuestros caminos se crucen con individuos tan comunes en muchos contextos sociales. Para ellos, el interés y el egoísmo se enmascaran detrás de una brillante amistad. Y caemos en su trampa, claro.
7 características de los amigos falsos
Las siguientes suelen ser las características principales que pueden presentar esta clase de individuos, a quienes les encanta esconderse en el disfraz del «buen amigo», pero son todo lo contrario.
1. El escalador social
Uno de los primeros falsos amigos con los que nos solemos encontrar en la vida son los «escaladores sociales». Los vemos en la escuela primaria, secundaria, universidad y por supuesto en el lugar de trabajo.
Son aquellas personas que construyen amistad con un solo objetivo en mente: ascender en la escala social. Es frecuente que estas personas se unan a los estudiantes más populares o mejores durante sus años escolares. Posteriormente, y también en la vinculación laboral, no dudan en humillar y manipular a los demás en cada situación para ascender a un puesto superior.
2. Amante del clima tranquilo, ausentes en las tempestades
Este es un tipo bien conocido de amigo falso. Estamos hablando de personas que siempre están presentes en días de paz y prosperidad. Están listos para participar con nosotros en cualquier fiesta o actividad de ocio. Pero cuando surge un problema o una situación difícil, cuando realmente necesitamos su apoyo y ayuda, desaparecen como el viento.
3. Un burlador que te juzga
Las amistades más saludables son aquellas que nos brindan bienestar en todo momento. Estos amigos nos hacen sentir bien con su cercanía. Estamos seguros de que no nos juzgarán ni criticarán y que después de pasar unas horas con ellos, nos iremos sintiéndonos mejor que cuando llegamos.
Sin embargo, esto no sucede con los falsos amigos. Es común entre ellos que lleguemos a casa sintiéndonos peor que antes. Un tipo de amigo falso es aquel cuyo pasatiempo es buscar cada uno de nuestros fracasos, señalar cada error que cometemos y juzgarnos una y otra vez. Este tipo de dinámica crea un estrés emocional considerable.
4. Un amigo que silenciosa o descaradamente te envidia
“Siempre haces todo a la perfección”, “a mí no me pasan las cosas como a ti”, “siempre tienes tanta suerte”… Estas y otras frases son las que repiten este tipo de amigo falso. Amigos que en el fondo te envidian.
Su baja autoestima conduce a este tipo de interacción que es muy poco saludable para ambas partes.
5. No quieren verte triunfar, aunque fingen motivarte para ello
Este falso amigo es a la vez peculiar y muy común. Tenemos personas en nuestras vidas que nos animan a superar obstáculos y triunfar. Pero cuando lo conseguimos, en lugar de animarnos, se distancian de nosotros y se ven incómodos.
Esta situación es una vez más provocada por la baja autoestima. Esos amigos siempre se sienten más cómodos cuando están al mismo nivel y en la misma situación que nosotros. Sin embargo, cada atisbo de éxito o superación de un obstáculo les hace sentirse inferiores y aumenta sus sentimientos de conflicto e incomodidad.
6. Un rival disfrazado de mejor amigo
Si compras un teléfono móvil, uno de tus amigos definitivamente buscará uno mejor. Si te apuntas a un gimnasio, él hará lo mismo para superar tus logros. Su meta es ser mejor que tú en cualquier cosa que hagas, sean cuales sean tus metas y tus logros.
Estos falsos amigos actúan como nuestros enemigos, perseguidores y sombras vengativas que intentan superarnos en cualquier aspecto de nuestras vidas.
7. El amigo manipulador
Un amigo manipulador es un ejemplo comedido pero irreconciliable de falsa amistad. Casi sin que lo sepamos, anclan su hilo sobre nosotros como un títere para poder manipularnos a su antojo. A veces utilizan el sacrificio, a veces el chantaje mental, y otras, engaños y estrategias para tenernos cerca de su dedo meñique y conseguir lo que quieran cuando quieran.
Mientras permitamos que esto suceda, el manipulador depende de nuestro afecto. Tal vez este amigo ha estado contigo durante mucho tiempo, incluso desde la infancia. ¿Cómo se rompe este vínculo afectivo que dura tantos años? Puede doler, pero pocas cosas son tan destructivas como permitir que alguien influya en nuestras vidas cuando en realidad no nos ama o nos ama de manera equivocada.
En resumen, como ya puedes adivinar, existen muchos tipos de falsos amigos; los que critican, los que engañan, los que chismean… La lista es interminable. Lo más importante, además de reconocerlos, es saber tratar con ellos.
No necesariamente tienes que romper el vínculo entre tú y tu amigo. A veces es suficiente hablar de las cosas con claridad, poner límites a la relación o incluso ayudar al crecimiento personal y la autoestima del amigo en cuestión para crear una relación más sana.
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