Padres que abusan mentalmente de sus hijos adultos

Muchos padres abusan psicológicamente de sus hijos adultos con manipulación emocional, críticas y comparaciones. Estas dinámicas invisibles pueden erosionar el bienestar de hombres y mujeres que siguen dependiendo de sus padres.

Muchos padres abusan psicológicamente de sus hijos adultos con manipulaciones, chantajes, palabras hirientes y comentarios que refuerzan las inseguridades de la infancia.

Madre que abusa psicológicamente de su hija adulta

El paso del tiempo no garantiza que los apegos dañinos de la infancia sean destruidos o reparados. A veces continúan hasta bien entrada la edad adulta, afectando negativamente la autoestima y el bienestar.

El abuso psicológico viene en muchas formas y puede afectar a cualquier persona. Algunos niños abusan de sus padres mayores, algunos padres abusan de sus hijos pequeños, e incluso algunos hombres y mujeres independientes siguen siendo abusados ​​por su padre, su madre o ambos padres.

¿Qué se puede hacer cuando los padres abusan psicológicamente de un hijo adulto?

Llegar a los servicios sociales u otras organizaciones que se ocupan de tales problemas a menudo parece inútil para los adultos que se enfrentan al abuso.

¿Cuál es el punto de tratar de arreglar algo con lo que has tenido que lidiar desde que eras un niño?

Muchas víctimas de abuso psicológico no creen que sea posible cambiar las circunstancias. Se han retirado de la situación y todavía están en contacto con el padre abusivo.

Una cosa está clara: un padre abusivo y sus hijos siempre tienen un vínculo, una conexión que genera adicción, miedo e incluso amor. Es una forma dañina de amor, evidentemente envenenada por el abuso. Desafortunadamente, estas situaciones son comunes y pueden volverse crónicas fácilmente.

Padres que abusan mentalmente de sus hijos adultos

El maltrato psicológico es cualquier comportamiento que busca controlar o subyugar a otra persona a través del miedo, la manipulación, la humillación, la intimidación, la proyección de culpa, la coerción y la desaprobación constante.

Si bien este tipo de agresiones pueden no dejar marcas físicas, sí afectan la integridad psicológica. Por ejemplo, los efectos que tienen en la mente del niño pueden ser devastadores. Cuando este tipo de abuso continúa durante décadas, puedes imaginar las consecuencias. Tiene un gran impacto en aspectos fundamentales como la autoestima, la identidad y la seguridad personal.

Este tipo de abuso no comienza cuando la víctima es adulta

Siempre tiene sus raíces en el comportamiento que comenzó en la infancia. Explica por qué muchas personas crecen con un pesado bagaje emocional. De hecho, una vida de abuso psicológico puede conducir al trastorno de estrés postraumático.

Un aspecto notable de este tipo de abuso es el esfuerzo extraordinario que la gente hace para fingir que todo es normal. Muy rara vez los familiares y amigos, incluso aquellos que son cercanos, saben algo sobre el abuso. Las circunstancias se mantienen ocultas y ferozmente protegidas.

La normalización del abuso por parte de los padres

Como mencionamos anteriormente, hay muchos padres que abusan psicológicamente de sus hijos adultos. La primera pregunta que podrías hacerte es por qué sucede esto. ¿Cómo pueden las personas soportar estas terribles circunstancias? ¿No sería mejor para estas personas cortar los lazos con estos padres abusivos?

Pero nunca es tan simple. La conexión entre una víctima y un abusador es increíblemente compleja. A veces todavía puedes amar a una persona que te lastima, a pesar de las terribles circunstancias llenas de ansiedad, miedo, humillación y desprecio. Después de todo, son tus padres. Si nunca has conocido ningún otro tipo de relación padre-hijo, este comportamiento puede parecer «normal».

En consecuencia, los hijos adultos siguen soportando abusos y vacilan entre el amor, el miedo, el cariño y el odio. Sus padres abusivos no cambian su comportamiento solo porque su hijo es un adulto. El desprecio, la crítica, la humillación y la manipulación emocional siguen siendo útiles para controlar y ejercer el poder.

El paso del tiempo no convierte a los monstruos en ángeles. Continúan prosperando con el poder y el control porque es parte de su personalidad.

¿Cuál es el efecto de este abuso psicológico?

Una de las consecuencias del maltrato emocional y psicológico que se inicia en la infancia es el trastorno de estrés postraumático. Los estudios sociales de la Universidad de Utrecht y la Universidad de Coimbra en Portugal han demostrado la importancia de esta relación.

Así, el maltrato psicológico que se prolonga hasta la edad adulta tiene las siguientes consecuencias:

  • Relaciones afectivas problemáticas e insatisfactorias.
  • Baja autoestima, sentimientos de inutilidad, orgullo dañado, sentimientos de inseguridad y falta de motivación, etc.
  • Represión emocional y tendencia a ocultar las emociones.
  • Ansiedad, estrés, problemas de sueño, etc.

Cómo terminar con el abuso

Aunque tales situaciones a menudo parecen desesperadas, hay formas de salir de una relación abusiva. Primero, el adulto debe ser plenamente consciente del abuso y comprometerse a abordarlo. Es más fácil decirlo que hacerlo porque la adicción es común en las relaciones abusivas. Dependencia no solo emocional, sino también financiera. Muchos adultos en esta situación no pueden salir de casa de sus padres porque no son económicamente independientes.

Sin embargo, ser financieramente estable no significa que sea fácil cortar estos lazos violentos. Son muy difíciles de romper debido a la constante manipulación y crítica del abusador. La víctima debe creer que su situación es insostenible y debe cambiar.

Por lo tanto, solo hay dos opciones. Exponer a los padres abusivos y cortar los lazos con ellos o reducir significativamente la comunicación.

De la misma manera, los hijos adultos de padres abusivos necesitan ayuda psicológica. Décadas de humillación y sufrimiento dejan una herida muy profunda que necesita sanar. El objetivo es que recuperen su sentido de sí mismos, su seguridad personal y que reconstruyan sus vidas para que puedan ser independientes y felices.