El escritor, novelista, ensayista y pintor Ernesto Sábato (nacido en 1911) fue uno de los intelectuales argentinos más desafiantes del siglo XX, preocupado por las interpretaciones surrealistas y reales de los fenómenos, en la vida real e imaginaria.
Breve biografía de Ernesto Sábato
Ernesto Sábato nació en Rojas, ciudad de la provincia de Buenos Aires, el 24 de junio de 1911. Tuvo 10 hermanos, hijo de padres italianos inmigrantes, recibió formación secundaria y universitaria en La Plata, la capital provincial. Obtuvo su título universitario en física en 1937, trabajó con una beca en el laboratorio Joliot-Curie de París en 1938 y en el Instituto Tecnológico de Massachusetts en 1939. En 1939 publicó un artículo profesional sobre su especialidad, la radiación cósmica. De 1940 a 1945 enseñó en la Universidad de La Plata, pero la dictadura de Perón lo obligó a renunciar por ser políticamente indeseable.
Por diversos motivos, Sábato abandonó esta labor, dedicando su tiempo a la literatura. Las tres novelas de Sábato, que han sido traducidas a más de 30 idiomas, están en inglés El túnel (1948); Sobre héroes y tumbas (1961); y El ángel de las tinieblas (1974). Sus principales ensayos son Uno y el universo (1946); Hombres y engranajes (1951); Heterodoxia (1953); El otro rostro del peronismo (1956); El escritor y sus fantasmas (1963) y Apologías y rechazos (1979).
Si bien desde su infancia, incluso antes de realizar otras tareas literarias o estudiar, se había dedicado a la pintura, fue en sus últimos años cuando decidió abocarse de lleno, incluso cambiando no solo la escritura, sino la lectura por la expresión de la pintura, esto también apoyado por su pérdida porcentual de visión.
Frases destacadas y fragmentos de libros de Ernesto Sábato
Frases de Ernesto Sábato extraídas de sus libros, entrevistas en las que participó, extracto de sus ensayos y opiniones varias que ha brindado a lo largo de su vida.
«Tenemos que abrirnos al mundo. No considerar que el desastre está fuera, sino que arde como una fogata en el propio comedor de nuestras casas. Es la vida y nuestra tierra las que están en peligro».
Antes del fin | Ernesto Sabato
«Mis mejores antecedentes están en el futuro«.
«La ciencia no nos enseña a vivir ni a morir»
«Para nosotros, cuando muere un anciano en la tribu, es como para ustedes, los occidentales, como si se incendiara una biblioteca.«
«En esta civilización occidental y occidentalista, nos creemos el colmo de la perfección, y ¡mire cómo nos va!«
«Por supuesto, no toda novela produce en el lector la misma cantidad ni calidad de perturbación. Las grandes novelas son aquellas que nos dejan distintos a lo que éramos antes.«
«Privar a un niño de su derecho a la educación es amputarlo de esa primera comunidad donde los pueblos van madurando sus utopías.«
«Así se da la felicidad, en pedazos, por momentos. Cuando uno es chico espera la gran felicidad, alguna felicidad enorme y absoluta. Y a la espera de ese fenómeno, se dejan pasar o no se aprecian pequeñas felicidades, las únicas que existen».
«En la bondad se encierran todos los géneros de sabiduría».
«…Y él había suspirado entonces y ella le había dicho «qué». Y él le había respondido «nada», como respondemos cuando estamos pensando «todo».
Sobre héroes y tumbas | Ernesto Sabato
«¡Cuántas veces en la vida me ha sorprendido cómo, entre las multitudes de personas que existen en el mundo, nos cruzamos con aquellas que, de alguna manera, poseían las tablas de nuestro destino, como si hubiéramos pertenecido a los capítulos de un mismo libro!«
«Muchas veces me ha pasado eso: luchar insensatamente contra un obstáculo que me impide hacer algo que juzgo necesario o conveniente, aceptar con rabia la derrota y finalmente, un tiempo después, comprobar que el destino tenía razón».
El túnel | Ernesto Sabato
«Al fin de cuentas estoy hecho de carne, huesos, pelo y uñas como cualquier otro hombre y me parecería muy injusto que exigiesen de mí, precisamente de mí, cualidades especiales; uno se cree a veces un superhombre, hasta que advierte que también es mezquino, sucio y pérfido».
El túnel | Ernesto Sabato
«El lenguaje es el primer y más importante instrumento de un hombre que escribe, pero también su mayor y más insidioso enemigo».
«Siempre tuve miedo al futuro, porque en el futuro, entre otras cosas, está la muerte».
«En todo caso había un solo túnel, oscuro y solitario: el mío, el túnel en el que había transcurrido mi infancia, mi juventud, toda mi vida».
El túnel | Ernesto Sabato
