5 signos de que necesitas un consejero matrimonial

Cuando se necesita un consejero matrimonial

La pandemia de COVID-19 ha planteado serios desafíos para muchas parejas. Las preocupaciones de salud, el estrés financiero, la convivencia en espacio reducido por largos periodos y las interacciones sociales limitadas con los demás pueden ejercer mucha presión sobre un matrimonio, especialmente si hay niños involucrados.

¿Cómo sé si necesito un consejero matrimonial?

Un consejero de parejas profesional puede ayudarte a navegar los períodos difíciles de la vida y fortalecer tu relación de pareja. Pero puede ser difícil saber cuándo buscar ayuda y cómo convencer a tu pareja para que participe en el proceso de curación. Si no te sientes satisfecho con tu relación, aquí hay cinco señales de que podrías beneficiarte al hablar con un consejero matrimonial.

1. Peleas frecuentes

¿Estás enojado con tu pareja por cosas pequeñas e insignificantes? ¿Sientes que tienes la misma discusión una y otra vez? Si deseas salvar tu matrimonio, un consejero matrimonial puede ayudarte a descubrir qué está causando la ruptura de la comunicación al identificar los problemas y emociones subyacentes detrás de los desacuerdos recurrentes.

2. Se guardan secretos el uno al otro

Una relación romántica sólida se basa en la confianza. Mentir u ocultar la verdad a tu pareja puede ser un signo de disfunción grave. Cuando las mentiras y los secretos amenazan los cimientos de un matrimonio, un terapeuta profesional puede ayudar a las parejas a ser más abiertas y honestas en su comunicación y aprender a confiar el uno en el otro nuevamente.

3. Falta de intimidad

Para las parejas en relaciones a largo plazo, es común que el deseo sexual fluctúe con los años. Si la ausencia de afecto e intimidad física se convierte en una preocupación en tu relación, un consejero matrimonial puede descubrir la raíz del problema y sugerir formas para que ambos vuelvan a encender esa chispa de pasión.

4. Un gran cambio de vida

Los momentos de crisis y cambios dramáticos pondrán a prueba cualquier relación. Los eventos importantes como la muerte de un familiar, la pérdida del trabajo, una enfermedad grave o una mudanza al otro lado del país pueden ser difíciles de sobrellevar.

Estas transiciones pueden ser más fáciles de navegar junto con el apoyo y la orientación de un tercero objetivo, como lo puede ser un terapeuta de pareja.

5. Has perdido el interés en la relación

Ya sabes lo que dicen, lo opuesto al amor no es el odio, es la indiferencia. Si bien las peleas constantes pueden ser una señal de que la relación necesita mejorar, la ausencia de argumentos puede ser igualmente problemática.

Si te sientes apático con tu pareja, podría ser el momento de solicitar la ayuda de un consejero matrimonial. Un buen terapeuta fomenta la comunicación abierta y honesta en las parejas, para que puedan trabajar sus problemas, expresar sus emociones y plantear estrategias para avanzar en la relación.

Estrategias para las parejas

Sin embargo, la consejería matrimonial requiere la aceptación de ambos individuos en la relación. Si tu pareja duda en trabajar con un consejero matrimonial, aquí hay algunas técnicas para ayudarte a convencerlo de que te acompañe en el viaje:

Elige tu momento

No menciones la idea de la terapia de pareja en medio de una pelea. En su lugar, aborda el tema durante una interacción amistosa para que quede claro que tus intenciones provienen de un lugar de amor.

Sé vulnerable y honesto acerca de tus emociones. Dile a tu pareja cómo te sientes y sé directo sobre cómo puede apoyarte.

Reconoce tus preocupaciones para que se sientan comprendidos. Es posible que debas informar a tu pareja sobre cómo funciona la consejería matrimonial o disipar algunas de las creencias negativas que pueda tener sobre el proceso.

Adopta un enfoque de equipo. Trabajen juntos para elegir un consejero y establecer sus objetivos para la relación.